El
imperialismo yanqui, la superpotencia hegemónica única, y enemigo principal de
los pueblos del mundo sigue desarrollando su guerra de agresión por partición y
nuevo reparto en el llamado Medio Oriente Ampliado (MOA), en colusion y pugna
con la superpotencia atómica rusa y las demás potencias imperialistas. Para la
estrategia de dominación yanqui elMOA que va hasta Afganistan es la puerta de
acceso a Asia Central, zona clave que comunica ambos flacos de Eurasia y ésta
es considerada el continente central de la Tierra para mantener y ejercer su
condición de superpotencia hegemónica única que ostenta desde la disolución de
la ex Unión Soviética por la bancarrota del revisionismo. Para la llamada geostrategía
yanqui (Brezezinski, 1997) Eurasia va desde el Atlántico l hasta
China. Los imperialistas yanquis y sus rivales imperialistas, siempre en dura
contienda entre ellos, se encuentran en guerra de agresión imperialista, en
guerra de rapina contra las naciones oprimidas del MOA, por partición y nuevo reparto.
El carácter de clase de esta Guerra, por
tanto, es de guerra injusta, de guerra reaccionaria y de guerra
contrarrevolucionaria porque se enfrenta a la resitencia de los pueblos de esas
naciones.
El plan de
mantención de la hegemonía mundial y de
gendarme contrarrevolucionario mundial del imperialismo yanqui, con
respecto a Eurasia. Según el citado Brzezinki, uno de sus principales estrategas, quien ha
servido desde los gobiernos de Carter, de quien fue Asesor de Seguridad
Nacional, hasta el de Obama en su calidad de estratega y especialista en
política exterior, en forma resumida lo expresa así:
“En la
última década del siglo 20. la situación mundial se ha transformado
profundamente. Por primera vez en la historia un Estado no europeo paso ha ser
no sólo el árbitro de las relacines de poder en Eurasia, sino también a ser la
superpotencia hegemónica mundial.. Con el fracaso y hundimiento de la Unión
Soviética ( a consecuencia de la bancarrota del revisionismo soviético, nota
nuestra) asume un un país del Hemisferio Occidental, por cierto los Estados
Unidos, como el único y en realidad primer verdadero Poder mundial”
(Brzezinski, Zbigniew. La única potencia mundial. Estrategía para el predominio
de América, 1997, p. 15)
“ Tan
explícito como se pueda, el mandamiento dice, no se debe permitir que surga
ningún competidor euroasiático, que pueda poner el continente eruoasiático bajo
su dominación y con lo cual pueda representar una amenaza para América” (p. 16)
“El
principal logro de América es Eurasia (…) Ahora da el tono allí un poder no
euroasiatico – y la prosecución (o mantención) de la hegemonía mundial de
América depende directamente de ello, cuan largo y como efectivamente ella se
pueda afirmar allí” (p 53)
“En ese
contexto, eso tiene que ver en cómo América se realaciona con Eurasia. Eurasia
el el más grande continente de la Tierra y tiene la calidad de eje. Una
potencia, que domina Eurasia, lo haría sobre dos de las tres regiones más
desarrollaas y productivas de la Tierra. Una mirada al mapamundi basta para
reconocer, que el control sobre Eurasia casi automáticamente se extiende sobre
Àfrica y con ello el Hemisferio Occidental y Oceanía frente al continente central de la Tierra
queda en una situación marginal. Además, 75 por ciento de la población mundial
vive en Euroasia y en su suelo como en sus empresas se encuentra la mayor parte
de la riqueza material del mundo. Eurasia contribuye con el 60% del Producto
Sozial Bruto y posee tres cuartapartes de las reservas mundiales de energía”
(p. 54).
En el libro citado esta definida la inportancia que tienen tres países
oprimidos para amantener el dominio en este continente y aplastar el peligro
que allí representan Rusia y la Unión Europea (Alemania): uno es Ucrania en la
parte europea, otros son Ubekista –clave para el dominio de lo llaman los
Balkanes asiáticos (dentro de las cuales se encuentras 7 repúblicas
ex-soviéticas) y la puerta para ellos es Afganistán y por lo tanto su dominio
del Caspio hasta el Golfo Pérsico . En nuestras siguientes entregas seguiremos
citando a este estratega yanqui y las citas que hemos tomado nosotros de otro
autor.
Como hemos
visto en el post anterior el imperialismo se encuentra en crisis general y esto
se expresa en todos los ordenes, desde el económico hasta el politico y
militar, donde cosechan fracaso tras fracaso y eso lo lleva a atollarse cada
vez más en su gurra injusta. Los Estados Unidos, según lo manifiestan los
propios representantes de las facciones imperialistas rivales esta muy divididos,
tanto a nivel de su burguesía imperialista y tampoco hay unidad entre el
gobierno y el pueblo y el proletariado y el pueblo cada vez mas manifiestan su
rechazo al sistema. Pore eso los imperialistas yanquis tienen que asusar cada
vez más abiertamente el chovinismo imperialista y crear toda una hysteria y miedo contra los pueblos de esos países
blandiendo el “peligro musulmán”, “la amenaza de los hombres malos” (latinos, mexicanos), etc. es clave para mantener su hegemonía. Hoy día
continuamos citando del Presidente Gonzalo, del debate que se da en el seno de
la reacción SOBRE ESTRATEGIA Y DIRECCION DE LA GUERRA, para que quede más claro
la necesidad del imperialismo yanqui de aplicar el centralismo absoluto con absolutismo
presidencialista:
"El
Presidente Mao nos enseña:
" Los
sistemas de gobierno de tiempos de guerra pueden dividirse generalmente en dos
tipos: uno es el centralismo democrático, el otro, el centralismo absoluto,
según lo determine la naturaleza de la guerra. Todas las guerras en la historia
pueden dividirse, de acuerdo con su naturaleza, en dos categorías: guerras
justas y guerras injustas. Por ejemplo, la Guerra Europea que estalló hace más
de 20 años fue una guerra injusta, imperialista. Los gobiernos de los países
imperialistas de entonces forzaron a los pueblos a combatir por los intereses
del imperialismo, yendo así contra los intereses del pueblo; estas
circunstancias requerían gobiernos como el de Lloyd George en Inglaterra. Lloyd
George reprimió al pueblo inglés, prohibiéndole hablar contra la guerra
imperialista y proscribiendo toda organización o reunión que expresara la opinión
popular contra la guerra; aunque subsistía el Parlamento, éste era simplemente
órgano de un grupo de imperialistas y no servía sino para votar dócilmente el
presupuesto de guerra. La ausencia de unidad entre gobierno y pueblo en la
guerra da origen a un gobierno de centralismo absoluto, que necesita sólo
centralismo y no democracia. Pero, en la historia, también ha habido guerras
revolucionarias, como la de Francia, la de Rusia, y, actualmente, la de España.
En tales guerras, el gobierno no teme la desaprobación del pueblo, porque es
éste el que más desea sostener esa clase de guerra; basándose en el apoyo
voluntario del pueblo, el gobierno, lejos de temer a éste, se esfuerza por
despertarlo y lo orienta a expresar sus puntos de vista, de modo que participe
activamente en la guerra. La guerra de liberación nacional de China goza de la
plena aprobación del pueblo y no puede triunfar sin su participación; por eso,
el centralismo democrático se ha convertido en una necesidad. En China, la
victoria de la Expedición al Norte de 1926 a 1927 se logró igualmente gracias
al centralismo democrático. Se ve así que, cuando los objetivos de una guerra
reflejan directamente los intereses del pueblo, cuanto más democrático es el
gobierno, más eficazmente puede llevar adelante la guerra. Tal gobierno no
tiene razón alguna para temer que el pueblo se oponga a la guerra y, en cambio,
lo que debe inquietarle es que el pueblo vaya a permanecer inactivo o
indiferente ante ella. La naturaleza de la guerra determina las relaciones
entre el gobierno y el pueblo. Esta es una ley de la historia."
(Entrevista con J. Bertram, T. II Obras escogidas)".
"En la
Sesión Preparatoria del II Pleno del Comité Central, en las páginas 355 a 357,
el Presidente Gonzalo comenta esta cita, tales comentarios son absolutamente
válidos. Es dentro de este marco que en el Perú se desenvuelve el debate sobre
estrategia y dirección de la guerra. Algunos sostienen que se puede dirigir una
guerra contrarrevolucionaria con democracia, pero se estrellan contra la
realidad, como lo estamos viendo en el país, porque una guerra
contrarrevolucionaria solamente se puede dirigir con centralización absoluta; e
implica imposible unidad verdadera entre el pueblo y el gobierno reaccionario,
y que todas las instituciones se tornan cada vez más formales hasta devenir en
negación completa de la democracia demoburguesa.
(…)En el
fondo de estos debates se expresa la tendencia indefectible hacia la
centralización absoluta para dirigir la guerra contrasubversiva y la necesidad
que tienen de desarrollarla en los cuatro planos contando con mando único,
pues,(no pueden seguir) actuando con doble mando (…). Sin embargo, la tendencia
a la centralización absoluta choca en el propio seno de la reacción con
posiciones demoburguesas que están en contra de un manejo que sobrevalore lo
militar y pugnan por mantener su orden demoburgués (…) Así, el debate sobre
estrategia y dirección prosigue dentro de la necesidad de desarrollar su guerra
contrasubversiva en todos los planos y de contar con un mando único,
agudizándose la contradicción entre "manejo militar o manejo político;
siendo su tendencia la centralización absoluta y el manejo militarista de la
contrasubversión".