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REDACCIÓN DE
AND
04
enero 2019
Foto
ilustrativa - Huelga de los Camioneros / Junio de 2018
Reproducimos abajo la convocatoria de la Liga Obrera, enviada a nosotros por email, a una Huelga
General contra el decreto antipopular de Bolsonaro - que busca imponer un
salario de miseria al trabajador.
En su primer decreto Bolsonaro hace pagar lafiesta de toma deposeción alpueblo
En una
fiesta llena de pompas y seguridades esparcidas por todo el canto, que costó el
doble del costo de las posesiones de sus antecesores, gastando R $ 1 millón de
reales, el actual gerente militar reaccionario Jair Messias Bolsonaro - PSL
muestra por lo que vino ya en su primer decreto cortó de cada brasileño R $
8,00 al fijar en R $ 998,00 el ya menguado salario mínimo, lo que para algunos
desavisados e influenciados por los monopolios de prensa, que luego buscaron
declaración de "populares" pidiendo opiniones sobre el hecho y sólo
llevaron al aire a los famosos: "Antes de gotear que faltar", o bien
"muestra que algo se está haciendo y cada uno debe en-tenderlo", tales
respuestas se dan de forma aislada, pues si el trabajador suma el número de
trabajadores que, sobreviven exclusivamente de un salario mínimo, o depende del
índice de reajuste del mínimo para estipular sus pisos, verá que es alrededor de R
$ 536 millones al mes y R $ 6.968 mil millones en el año.
El hecho
ocurrió porque el cadáver insepulto Michel Temer-MDB, que había estipulado en R
$ 1.006,00 el salario mínimo, no firmó el decreto de ley, que tampoco solventaba las necesidades básicas de los trabajadores. Esto ocurre porque la política de
robo aplicada por todos los gerentes de turno paulatinamente quita el poder de
compra del salario mínimo, lo que podemos notar desde que fue estipulado en
1936 (en la época, el salario permi-tía al trabajador el acceso a vivienda,
alimentación, educación, salud, ocio, vestido, higiene, transporte y previ-sion
social.), hoy ese salario debería ser alrededor de R$4 mil
reales (R$3.959,98) de acuordo con el DIEESE - Departamento Intersindical de
Estatística y Estudios Socioeconômicos.
La Liga
Obrera ha denunciado esa política desde hace décadas y para romper con esa
política, siempre levantó la bandera de la Huelga General, para contrarrestar
la vergonzosa conciliación de clases hechas en los gabinetes en Brasilia,
principalmente a través de las cumbres de las centrales sindicales. Y por eso,
vuelve a convocar a todos los demócratas y luchadores del pueblo a organizarse
y luchar bajo las consignas: "Huelga General de Resistencia Nacional: -
por la revocación de la" reforma "laboral - contra la" reforma
"de la Previsión - contra la medida y en defensa del derecho de Huelga,
de Manifestación y de Organización, consignas que fueron aprobadas por más de
20 entidades en la celebración de los 30 años de la reanudación del sindicato
por la Marreta, por entender que ese es el único camino del pueblo para
bloquear todos esos ataques contra sus derechos y garantizar la soberanía
nacional.
Los
monopolios de prensa pronto buscan ofrecer los focos al reaccionario gerente
militar Jair Bolsonaro - PSL, para intentar empujar las reformas más nefastas para el pueblo lo más rápido posible, en nombre de la "democracia" y de
los resultados de los últimos comicios, no quieren que el pueblo despierte de ese letargo causada por los masivos ataques mediáticos de "gran
salvador del pueblo". El gerente actual, ni bien calienta la silla, sus -secuaces y lame-botas ya hablan con la mayor naturalidad en acabar con los
derechos laborales, de "reformar" la Previsión Social, de privatizar
todas las estatales, hacer política antipopular y vender-patria , de no permitir
el derecho de huelga, de manifestación y de organización y para ello, cuentan
con un Congreso Nacional reaccionario y vendido (comandado por la bancada del
Boi, la Biblia y la Bala) y algunos generales militares, que utilizan la onda
anti-PT y sus satélites oportunistas electores que macularon las principales
banderas de nuestra --clase a cambio de un puesto en el viejo y podrido Estado
burgués / latifundista para satisfacer sus programas --electorales y populistas.
El actual
ministro de Economía Paulo Guedes habla que para que Brasil pueda superar las
dificultades, debe "abandonar las leyes fascistas de la Carta del
Lavoro" (refiriéndose a la CLT), en esa, lo que hemos escuchado hace algún
tiempo por los defensores de los recortes de los derechos de los trabajadores y
también dice que la Previsión Social es una "fábrica de
desigualdades", intentando sobresalir con el pueblo predica "Quien
legisla y juzga tiene las mayores jubilaciones, y la población, las
menores", pero y los que están a favor de la "refor--ma" de la
Previdencia, no son los mismos privilegiados?
Es muy
importante que el pueblo brasileño de la ciudad y del campo se prepare para una
gran tempestad que está por venir, para eso debe organizarse de forma decisiva
y conocer mejor las fuerzas que puede contar. Sabe--mos que muchos en ese momento
buscarán adaptarse a los dictados del nuevo sirviente del imperialismo,
principalmente yanqui, rodeado de generales y avalado por el Estado sionista de
Israel, nuestra fuerza está en nues--tra unidad y no en las escisiones causadas
por intereses que no están contenidos en nuestra. causa. Debemos buscar una
unidad táctica, defender una pauta común y bien definida y debatida con todos en los comités munici-pal, estatal y federal.
El decreto
ley de Bolsonaro sacó directamente de los más necesitados, una vez más buscan
poner en la espalda de los trabajadores la carga, mientras que por otro lado,
buscan refastillarse al máximo extrayendo los bonos divididos entre sus pares
reaccionarios que siguen concentrando cada vez más las riquezas del país en
manos de una minoría. ¡No hay otro camino! ¡A no ser el de la lucha! Y esa debe
ser trabada por toda clase de los explotados sin bajar la guardia, pues cuando
titubeamos nuestro enemigo se aprovecha y nos coloca en cizaña y por eso
tenemos que buscar nuestra unidad de acción táctica, sin dejarse influenciarse
por los vendedores de los derechos del pueblo y principalmente de las cúpulas
de las centrales. Crear comités de debates en todas las regiones, en los
barrios y en los lugares de trabajo y no aceptar que las cúpulas de las
centrales capitaneen los movimientos, debemos luchar y entender que la lucha es dura y de que las masas hacen la historia, siempre y cuando esté convencido de
su posición.