SÁBADO, 3 DE JUNIO DE 2023
[NACIONAL] Cuenta pública y las medidas nefastas del viejo Estado.
El reciente 01 de Junio el presidente del viejo Estado Gabriel Boric (FA) rindió en el parlamento la anual cuenta pública en colusión con el revisionismo del falso P"C" y oportunistas de otros partidos.
Respecto a la economía, Boric respaldó nuestra relación semi-colonial frente a las grandes potencias imperialistas, recalcando la figura de la "inversión privada" en el manejo de recursos naturales como la minería del cobre, litio y otros, junto con la agroindustria y salmoneras bajo capitales estadounidenses, europeos, chinos y otros. Más aún se reafirma esta condición de saqueo bajo el gendarme del FMI en nuestro país, el ministro de Hacienda Mario Marcel quién, guiado por el Banco Mundial aplica las medidas de hambre y descarga de las crisis en los pobres. Recordemos que el precio de la vida en Chile está aumentando con la crisis mundial. En tan solo un año el precio de la vida se ha encarecido un 28%, en especial los productos básicos como la comida, agua, luz o la vivienda.
Otro aspecto que revela las mentiras son la afirmación que el Estado no tiene los fondos para hacerse cargo de la deuda histórica de los profesores afectados por el golpe de Estado de 1973 y de la deuda de miles de estudiantes con el Crédito con Aval del Estado (CAE). TODAS ESTAS HABÍAN SIDO PROMESAS DE CAMPAÑA, promesas que usaron para encantar a algunos sectores del pueblo.
Finalmente en materia de represión, además de respaldar el carácter genocida de las policías y las Fuerzas Armadas (FF.AA.) en especial contra los pobres y el pueblo Mapuche, tenemos los intentos de promulgar la nueva "Ley Maldita": La Ley Antitomas. Actualmente, la toma de la tierra o de una vivienda está sancionada con multas, tanto la toma con violencia como sin violencia. Con la propuesta de la ley, dejaría de ser una sanción económica a un delito con penas de cárcel.
Queda claro: el único camino es la lucha, organización y la revolución, no las ilusiones constitucionales, las elecciones burguesas ni las falsas promesas.
