I
Como venimos viendo, el estudio de la
CEPAL sobre las Mipymes, documenta, que la gran empresa del imperialismo o de
la gran burguesía nativa, a su servicio, que es la que domina las exportaciones
primarias, más las empresas medianas o nacionales constituyen el llamado sector
moderno de la economía, el resto
pertenece en su inmensa mayoría a la economía pre-capitalista (semifeudalidad).
Ese camino de desarrollo basado en la
inversión imperialista y orientado a la exportación de bienes primarios, es el
camino del capitalismo burocrático, el
camino dominante que el imperialismo imprime en un país atrasado como el nuestro,
en un país semifeudal y semicolonial. Ademas, el Estado que dirige esa base no
puede desarrollar las fuerzas productivas porque está al servicio de las tres
montañas que nos oprimen: el imperialismo, el capitalismo burocrático y la
semifeudalidad. Es importante comprender este problema, porque así estaremos
pertrechados para combatir la tesis del carácter capitalista del país y sus
derivaciones políticas.
Ese camino está basado en la extensiva utilización del
capital imperialista, de sus expertos y de tecnología proporcionada por este
capital extranjero y la “ayuda“ solo sirve para mantener el atraso y la
dominación de las tres montañas que nos oprimen. Se trata de romper con la
dominación imperialista, el capitalismo burocrático y la semifeudalidad mediante
la guerra popular para culminar la revolución de nueva democracia.
El crecimiento y la acumulación del capital -en la economía del capitalismo burocrático -
está al servicio del imperialismo, por eso, está orientado a la exportación
como lo primario, no se produce un crecimiento autosostenido y coordinado de la
agricultura, la industria doméstica y el comercio, sino subordinado al capital
extranjero y el mercado mundial imperialista e impide la coordinación de la
economía nacional. No podremos desarrollar la industria nacional sin acabar con
las tres montañas que nos oprimen, nos enseña el Presidente Mao. El Presidente
Gonzalo ha establecido, que: “El
capitalismo burocrático en el Perú es anti-campesino, destruye la producción
campesina y hunde más en la miseria al campesinado, estanca la industria rural,
la artesanía”.
Sabemos, según Lenin, cuando estudia el desarrollo del
capitalismo en Rusia y en la agricultura de los Estados Unidos, que la
elevación del desarrollo industrial crea mercado para la agricultura y
determina su intensificación y un más marcado carácter capitalista. El número
de agricultores independientes en proporción a la población rural en su
conjunto disminuye, mientras, el número de los agricultores dependientes, de
los explotados, es decir de los asalariados se incrementa. En el desarrollo del
capitalismo sin las atadura semifeudales. el incremento del empleo de trabajo
asalariado supera el aumento de la población rural y del número de farmars. Ese
es el típico desarrollo del capitalismo libre de las trabas feudales por la
revolución burguesa.
En nuestros país y demás países de América Latina y el
Caribe (ALC), donde no ha habido una revolución burguesa, no se ha destruido la
semifeudalidad y, por tanto, esta solo
evoluciona y se constituye en la principal traba de este desarrollo; por lo
que, si bien crece el número de asalariados (proletarios y semi-proletarios
agrícolas) por el desarrollo del capitalismo burocrático en el campo, basado en
los grandes latifundios, se mantiene y
hasta aumenta el número de pequeños
campesinos y de las unidades económicas de estos.
Característico de este proceso de lenta evolución de la
semifeudalidad al capitalismo burocrático es el aumento del minifundio,
expresada en número de unidades económicas pequeñas ( a continuación, en la
tabla 1, figuran como fincas pequeñas) y la concentración de la tierra en los
grandes latifundios (por el otro), ver también el indice de concentración de la
tierra en la tabla 1.
Fuente: Estructura y tenencia de la tierra agrícola en
América Latina y el Caribe, Germán Escobar,
marzo 2016, Fundación Friedrich Ebert.
Quien sostiene: “Los países de América Latina y el
Caribe (ALC) tienen una estructura agraria considerada entre las
más inequitativas del planeta. Una de las ex-presiones claras de la
heterogeneidad de ALC se puede leer en la estructura agraria en sí misma
(…) la estructura agraria del subcontinente comparte algunos elementos que se
relacionan con la concentración de la tierra y otros recursos del sector rural
en pocas manos, un alto grado de inseguridad jurídica de la tenencia de la
tierra y usos del recurso que configuran indicadores de baja productividad
(…) Asimismo, los productos consumidos en la región se producen, en su
gran mayoría, en las pequeñas explotaciones.
(…) La estructura agraria de ALC se ha modificado a lo
largo del tiempo y hoy presenta una condición diversa y contrapuesta en los
países de la región: los datos indican que existe una progresiva tendencia a la
fragmentación y minifundización en algunos países, al tiempo que se
constata la existencia de procesos de concentración de tierras en otros
(v. tabla 1)
(…) Especialmente llamativos son los valores y la
tendencia del índice de concentración de tierra para algunos países (v.
última columna de la tabla 1). En general, todos los valores del coeficiente
son muy altos, lo que muestra la gran concentración de la tierra (de hecho,
12 países de los 23 con información completa presentan valores del índice de
Gini iguales o superiores a 0,8; 1,0 significa un grado de concentración
total). Entre los países que registran una tendencia a incrementar el índice,
todos tienen valores superiores a 0,8”.
La parte citada del estudio de Germán Escobar, publicado
por la fundación del imperialismo alemán, pese a los intentos de velar la
realidad mediante el uso de la terminología de la académica, con los hechos que
aporta, muestra lo que venimos afirmando sobre el carácter de nuestra economía.
Los subrayados nuestros sirven a destacar lo antes afirmado. Asimismo, los
subrayados en los informes y anexos son nuestros, salvo observación en
contrario.
El Presidente Gonzalo dice:
“La división de la tierra, la
parcelación, lleva al minifundismo y éste determina un retroceso en el cultivo
del suelo porque se restringe la posibilidad de aplicar formas nuevas de
producción agrícola. En la parcela, trabaja toda la familia hasta el
agotamiento, se invierte una gran fuerza de trabajo pero el producto neto
disminuye progresivamente al aumento del producto bruto.
Esto mismo rige para toda la pequeña
producción, a más consumo bruto menos consumo neto y de esa ley nadie se
escapa, pero esto es óptimo para el imperialismo porque compra a menor costo
explotando inmensamente. Este fenómeno en el campo,
además repercute en contra del proletariado porque así el campo tiene que
consumir menos, la producción tiene que bajar, los salarios de los obreros se
reducen y hay mucho margen de desocupación. En otro texto, Marx nos habla de
que la pequeña propiedad está condenada por la historia”.
II
Es necesario ver,
en el informe sobre la Mympes, aunque solo trata de las
empresas formales, una interesante comparación, (ver gráficos I.1, y I.3), que nos permite diferenciar la estructura productiva de nuestros países
con la de los países capitalistas desarrollados o imperialistas, partiendo, de
nuestra parte, que no podemos borrar las diferencias entre la gran empresa del
imperialismo y la gran empresa de los países de capitalismo burocrático. No
podemos decir que “todo es monopolio”, si bien ambas tienen este carácter, las
grandes empresas monopolistas imperialistas desempeñan el papel dominante,
mientras la gran empresa monopolista del capitalismo burocrático (nativas) son
intermediarias de las primeras, esto es, agentes económicos del imperialismo.
Asimismo, el Informe antes nombrado, nos permite
documentar que no podemos ver el imperialismo como un todo, como lo advirtió
Lenin en su polémica contra Bujarín (ver anexo), porque no existe tal todo,
sino la conjunción de los dos “principios” contradictorios la competencia y el
monopolio, ; esto es tanto más válido, para su hijo enfermo, el capitalismo
burocrático, es decir, el camino dominante que el
imperialismo imprime en un país
semifeudal y semicolonial, no solo existe la gran empresa, sino también la
mediana o nacional, la pequeñas y hasta la llamada microempresa.
El Presidente Mao, precisó:
“Un puñado de capitalistas
monopolistas ocupan la posición dominante en estos países (imperialistas).
Conjuntamente se encuentra un gran número de capitalistas medianos y pequeños.
Se dice que el capital norteamericano está a la vez centralizado y
descentralizado” (Notas acerca
del Manual de Economía Política de la URSS).
“China
dispone ya de una industria moderna que constituye aproximadamente el 10 por
ciento de su economía; esto es un factor de progreso, esto difiere de los
tiempos antiguos (…)
China aún
tiene una agricultura y una artesanía dispersas e individuales que constituyen
aproximadamente el 90 por ciento de toda su economía; esto es un factor de
atraso, esto no difiere mucho de los tiempos antiguos; el 90 por ciento, más o
menos, de nuestra vida económica permanece aún en el nivel de los tiempos
antiguos (…)
La industria moderna de China está sumamente
concentrada, aunque el valor de su producción llega sólo al 10 por ciento
aproximadamente del valor global de la producción de la economía nacional; la
parte mayor y más importante del capital está concentrada en manos de los
imperialistas y de sus lacayos, los capitalistas burocráticos chinos (…)
La industria capitalista privada de China, que
ocupa el segundo lugar en la industria moderna del país, representa una fuerza
que no debe ser pasada por alto. La burguesía nacional de China y sus
representantes, oprimidos o restringidos por el imperialismo, el feudalismo y
el capitalismo burocrático, a menudo han tomado parte o mantenido una posición
neutral en las luchas de la revolución democrática popular.” (Presidente Mao,
Informe ante la II Sesión Plenaria del CC, 5 de marzo de 1949).
El informe de la CEPAL sobre los Mypimes, como se
verá se refiere a nuestros países, como
de “ una estructura productiva heterogénea”, tratando de velar el
verdadero carácter de la misma. Dejamos de lado, por el momento, la parte del
informe que se refiere a la categoría de las empresas y empleo. Veamos:
“ En relación con la Unión Europea, las diferencias
más relevantes se refieren al mayor peso relativo de las microempresas formales
y a la consecuente menor participación de las otras categorías de empresas,
incluidas las grandes, que en América Latina son el 0,5% del total,
mientras que en la Unión Europea alcanzan el 0,2%”.
Luego, más adelante, dice:
“La participación de las grandes empresas
es muy elevada en las áreas de minería; electricidad, gas y agua, e
intermediación financiera (...), que son los tres sectores de mayor
productividad en América Latina: en comparación con el promedio de la
economía (...)
(…) en América Latina (...) las empresas
de menor tamaño en actividades de baja productividad. Esto sugiere una
estructura productiva heterogénea en la cual un número reducido de
empresas concentran gran parte del PIB regional, en sectores con una
productividad muy elevada, mientras el resto se encuentra en actividades
cuyo desempeño es bastante pobre. En este sentido, vale la pena destacar
que, en la región, los tres sectores de más alta productividad representan el
26,9% del valor agregado, pero apenas el 8% del empleo total y el 1,8% del
número de empresas”.
Luego, nos muestra el gráfico 1.1 y el 1.3, donde
se ve cierta similitud en cuanto a la estructura de empresas de ambos tipos de
economía:
Gráfico I.3
Unión Europea: distribución de las empresas según tamaño, 2016
(En porcentajes)
Microempresas Pequeñas Medianas Grandes
92,9
5,9
1,0 0,2
Fuente: Elaboración propia, sobre la base de datos oficiales.
Pero, más allá de la similitud , en el mismo
informe se habla de las diferencias entre las empresas de nuestros países de
ALC (naciones oprimidas) y las empresas de los países imperialistas de la UE:
“En la Unión Europea el peso relativo de las
mipymes en el empleo formal es aún mayor que en América Latina y alcanza el
69,4%, aunque este no es el rasgo principal de las diferencias entre las dos
regiones, como se verá más adelante.
La información relativa a la producción
muestra con mayor claridad la heterogeneidad de la estructura productiva
de América Latina. Las mipymes concentran solo el 24,6% de la producción
(24,9% en 2009), pese a representar el 61,2% del empleo y el 99,5% de
las empresas.
La situación es
muy distinta en la Unión Europea, donde en 2015 las mipymes
representaban el 56,2% del valor agregado”.
Pero, la base más amplia lo constituyen las
microempresas, donde están las del autoempleo, el informe no habla de esto,
pero el autoempleo en América Latina no esta sujeto a relaciones de dependencia
(salariales), mientras que en la UE, la
relación salarial del contrato de
trabajo se disimula como contrato de servicios entre empresas, lo que la
Conferencia Internacional de Estadísticos del Trabajo de la OIT llama “formas
atípicas de empleo”(CIET, 2018, Resolución I) . En los países de la Unión
Europea, alrededor del 25% de los “no asalariados” son, en los hechos asalariados,
dependientes desde el punto de vista económico de un cliente o de un número muy
reducido de ellos”, según EUROFOUND, 2017. Esto es, se han creado formas
legales para eludir sus propias normas laborales y de la Organización Mundial
de Comercio, para que las empresas puedan emplear obreros como si fueran
empresarios independientes, encubriendo el contrato de trabajo como si fuera de
prestación de servicios. En los EE.UU. Los independientes son alrededor del 6%.
Teniendo
en cuenta la aclaración precedente sigamos con el informe, que dice:
“Las
diferencias más grandes entre las dos regiones se pueden observar en el
segmento de las microempresas.
En América Latina las microempresas corresponden al 88% de las
empresas formales y aportan el 27% del empleo y apenas el 3,2% de
la producción, mientras que en la Unión Europea representan el
93% de las empresas, el 30% del empleo y el 20% de la producción”.
Además, es necesario aclarar, para ver la
profundidad y extensión de las diferencias: que en el Perú del 78% al 72 % del
empleo es informal, luego pues, sumando todas las categorías, el empleo formal
varía de 22% a 28% de la PEA ocupada; eso muestra más aún el carácter del
atraso de nuestra economía, su carácter semifeudal , como los demás países de
ALC.
Prosiguiendo, el informe, muestra los siguientes
gráficos :
Luego, el informe, comenta:
“Esta situación refleja las características de las
microempresas de la región (así como de una parte de las pymes), ya que son empresas que operan en mercados locales
acotados que dependen de la evolución de la demanda interna, en sectores con
bajas barreras a la entrada y la salida, que tienen tasas elevadas de natalidad
y mortalidad y que, muchas veces, responden más a estrategias de
autoempleo y sobrevivencia que a una dinámica de desarrollo empresarial”.
Lo anterior aclara el carácter pre-capitalista,
no solo de la micro sino también de la pequeña y hasta algunas de las medianas
empresas, “alta tasa de natalidad y mortalidad”, se crean y mueren por que
operan en mercado cerrados o limitados, es decir, con escaso desarrollo de la
producción porque las maquinarias, equipos y hasta los insumos vienen del
exterior, por tanto, mercados acotados, demanda interna limitada por la vil
explotación de la inmensa masa de pequeños productores agrícolas, que producen
por debajo del límite físico y, pero, que proveen al mercado interno del 80 o
90 % del consumo interno, con lo cual mantienen bajo el salario y la demanda.
Esto sirve a mantener bajo el salario en las grandes empresas del imperialismo
y de sus agentes económicos nativos, la gran burguesía. No es problema de
aumento o baja de precios sino de intercambio de valores desiguales.
El pequeño
campesino destina parte de su producción al auto-consumo y el resto lo vende en el mercado, lo que
sumados constituyen la retribución a sus costos de producción, pero sin obtener
las partes del precio destinadas a cubrir la ganancia. De esta manera, el
plus-producto, la parte para retribuir el plus trabajo, se lo apropia como renta
pre-capitalista (semifeudal) de la tierra el Estado, los terratenientes, la
gran burguesía, todo en beneficio del imperialismo a través del intercambio
desigual en el comercio mundial y, principalmente, de la inversión del capital
imperialista bajo sus diversas formas (…) En qué
consiste la explotación, ver la diferencia, de una manera se la explota: como
clase organizada la burguesía la explota a través del Estado mediante
impuestos; y como capitalistas, en las modalidades de la usura, del préstamo,
del capital, del interés, los que no pagados se cobran con la hipoteca. Y ¿cómo
lo explota el terrateniente? por la renta. Así es como se diferencia la
semifeudalidad” (Presidente Gonzalo).
Todo sobre la base de la opresión imperialista sobre nuestros países, monopolio
económico del imperialismo sobre nuestra economía.
III
El informe abundando sobre las diferencia, a
continuación, dice:
“Las diversas especializaciones sectoriales y
estructuras productivas que diferencian a las mipymes latinoamericanas
de las europeas se hacen patentes, además, en la participación de estas
empresas en las exportaciones. Aquí el dominio de las grandes empresas es aún
mayor que respecto a la producción (véase el cuadro I.5).
Mientras en los países de la Unión Europea las
empresas de menor tamaño pueden llegar a generar más de la mitad de las
exportaciones, en América Latina, si se consideran los pocos casos en
los cuales se puede contar con información confiable, las grandes empresas
superan fácilmente el 80% de las ventas al exterior”.
Esto se refiere a que la mayoría de las empresas
medianas, pequeñas, etc. en los países imperialistas de la UE están integradas
en las diferentes redes de proveedores de los grandes monopolios. Mientras en
nuestros países tienen escasa conexión con la gran empresa, como se desprende
de la siguiente cita, que muestra la heterogeneidad de la economía, es decir,
un sector moderno (capitalista) y el resto, la mayoría, el sector atrasado, la
base semifeudal del país, el Informe dice:
“Cuando se considera la dinámica y la composición
de la economía, la explicación de esta brecha de productividad se puede
encontrar en la concentración de la producción en pocas actividades
intensivas en recursos naturales (agricultura, pesca, minería y algunos
sectores industriales), que generan una cantidad muy grande de divisas a través
de las exportaciones pero operan con muy pocas conexiones con el resto de la
estructura productiva y no tienen efectos relevantes en términos de derrames
tecnológicos, creación de capacidades locales y desarrollo territorial. Al
mismo tiempo, hay también cadenas productivas dinámicas, como es el caso de la
industria automotriz en el Brasil y México y, en menor medida, de la industria
aeroespacial en estos mismos países y la industria electrónica en México. Pero
se trata de casos aislados, cuyo éxito es cuestionado, o por lo menos
incompleto, y no logra modificar el panorama económico general de América
Latina”.
Aclaramos, que el informe aquí se esta refiriendo
a esa industria integrada dentro de las llamadas cadenas de valor - o integración vertical de los monopolios
imperialistas -, en general con la misma incidencia en el resto de la economía
del país que la gran empresa exportadora, luego pues, no se trata de industria
nacional xino de la maquila. Continuando con el informe:
“Estas diferencias y especificidades sectoriales
ayudan a entender la heterogeneidad estructural latinoamericana. Sin embargo, las características de las
empresas permiten visualizar otros aspectos igualmente importantes del mismo
fenómeno.
(…) el análisis de la productividad relativa
interna (La productividad relativa
interna se refiere al cociente entre el valor de la productividad del trabajo
de cada segmento de las mipymes y el valor de la productividad del trabajo de
las grandes empresas en un determinado país o región).
(…) En este sentido, en América Latina la
diferencia entre microempresas y grandes empresas es, en promedio, siete veces
mayor de la que se registra en Europa. Asimismo, las diferencias de
desempeño entre los distintos segmentos de empresas que forman las mipymes son
mucho más marcadas en América Latina que en la Unión Europea. Por ejemplo, en
esta última la productividad de una empresa mediana es menos del doble de
la de una microempresa, mientras que en América Latina es más de siete
veces superior”.
“(…) E.
Inserción en la estructura productiva. Las diferencias que se advierten
entre las mipymes de América Latina y de la Unión Europea reflejan sistemas
productivos distintos, en los cuales esas empresas evidentemente no se
insertan de la misma manera. En el primer caso, la inserción es
secundaria, dado que un número reducido de grandes empresas controla y
produce la mayoría del PIB y casi el total de las exportaciones,
mientras que en el otro el rol de las mipymes es central para garantizar
el funcionamiento de la estructura productiva, la creación de valor agregado y
las ventas al exterior de bienes y servicios (…)
Las experiencias de articulación productiva,
tanto bajo la forma de redes como de cadenas de proveedores, son relativamente
escasas en América Latina y además adolecen de serias limitaciones, incluso en
los casos más exitosos (…) un sistema productivo poco articulado y dominado por
un número reducido de grandes empresas”.
La estructura productiva de los países
imperialistas esta “coordinada” y sujeta a las grandes empresas monopolistas
generadas por el capital financiero, “centralizada y descentralizada”
(Presidente Mao).
“ En los países de la Unión Europea, la
mayoría de las mipymes se encuentran articuladas entre sí en redes, son
parte de cadenas de proveedores de grandes empresas nacionales y extranjeras,
y producen bienes y servicios específicos que no compiten con los productos de
fabricación masiva de las grandes empresas.
Lo expuesto por el informe sobre las Mipymes en
América Latina, concuerda con lo que, como habíamos visto, se resume en el
“Perfil económico-productivo del país en la actualidad” ( Los desafíos de la
transformación productiva en América Latina, Perfiles nacionales y tendencias
regionales, Tomo 1: Región Andina, Friedrich-Ebert-Stiftung, CAPÍTULO V Perú
—luis ángel rodríguez salcedo), cuando se refiere al “carácter primario
exportador y de servicios” “orientado al mercado mundial” de la misma y su
falta de encadenamiento con el conjunto de la economía: “economía de enclave”,
que no genera empleo, etc.
Ese “modelo” corresponde al capitalismo tardío
que el imperialismo impulsa en nuestros países sobre la base semifeudal y
semicolonial, que genera más atraso, sometimiento y deformación de la estructura productiva del
país.
Recordemos, que el desarrollo del capitalismo ha
seguido el camino inverso tanto en Europa como en los Estados Unidos, Japón,
Canadá, Australia, Nueva Zelandia, es decir de adentro hacia afuera. Por eso,
Lenin, para estudiar el desarrollo del capitalismo en Rusia se permitió la
abstracción del mercado exterior siguiendo lo establecido por Marx en El
Capital.
IV
Deslindando con el informe Mipymes de la CEPAL
Las micro y pequeñas empresas, como
los pequeños campesinos, están sometidas a siniestra opresión y abarcan gran
cantidad de fuerza de trabajo; como
dicen los propios reaccionarios, sirven de “colchón social”, pues en esas masas
se basan las políticas del imperialismo y los gobiernos reaccionarios para
imponer sus políticas de esquilmación y nueva acumulación capitalista, aparte
de apuntar allí a tener una base social de lacayos o adeptos o masa engañada
por un tiempo.
Sobre la base de esa masa de
productores de la ciudad y el campo sometido a siniestra explotación, que
produce en las peores condiciones y hasta por debajo del límite físico de su
fuerza de trabajo, se desenvuelve el camino dominante que el imperialismo
impone en nuestro país (el capitalismo burocrático), se mantiene bajo el valor
de la fuerza de trabajo asalariado en beneficio de la gran burguesía y el imperialismo.
El impulso de las instituciones imperialistas como la CEPAL y de los diferentes
gobiernos reaccionarios de nuestro pais a las politicas de fomento de las
Mipymes solo sirven a esquilmar las energias de nuestro pueblo.
Ese tipo de empresas, tanto en la
ciudad como en el campo, sirven para bajar las remuneraciones y que suban las
ganancias, dice el Presidente Gonzalo esto no es de extrañar en todo sistema
capitalista, mucho más en el sistema del capitalismo burocrático, es parte de
su proceso y quien se beneficia es la gran burguesía y el imperialismo.
La mayoría de empresas señaladas en
el párrafo anterior, pertenecen al caso de la producción mercantil simple, en
que cada productor está unido a sus propios medios de producción, no se trata
del productor desnudo desprovisto de medios de producción y de vida, aunque
estos sean miserable y propios del estado de atraso producto de la
semifeudalidad. Además, en el caso de la mediana empresa, la composición
orgánica del capital es baja, y su productividad es muy por debajo de la gran
empresa imperialista en el país y, mucho más, es la diferencia con respecto a
las empresas en los países imperialistas. Lo mismo podemos decir de la gran
empresa exportadora de la mineria, agroexportación, etc del capitalismo
burocrático, que tienen baja acumulación de capital, son rentistas y producen
con salarios, de lejos, más bajos que las grandes empresas imperialistas.
Las Micro y pequena empresas, formales e
informales, son en su gran mayoría, como se colige del informe de Statita antes
citado, precapitalistas, esto es expresan la base semifeudal del pais.
El Informe del II Pleno del CC del
PCP, de comienzos de los 90 del siglo anterior, dice: Si juntamos la micro,
pequeña y artesanía tendríamos el 26% del PBI, la media aporta con el 28% ella
sola, ahí está su fuerza; y la gran industria aporta con el 46% esto es la
mayor producción la aporta la grande y comprende el 12.3% de la PEA industrial,
con pocos obreros aporta el mayor porcentaje productivo, esto es propio de todo
sistema capitalista, además solamente con el 0.14% de empresas. Entonces, cómo
que la micro, pequeña y media producción son el eje del desarrollo económico,
no puede ser motor, no es real dentro de su sistema.
Otra política: superación de la
desarticulación estructural, particularmente entre pequeña y mediana empresa
con la gran empresa. Lo que buscan el imperialismo, la CEPAL y los gobiernos
reaccionarios es atar a las dos, pequeñas y mediana, a la grande a través de
sistemas financieros y salarios bajos, sistemáticamente; todo en función de la
gran industria y ésta orientada a la exportación en servicio del imperialismo.
Luego el nuevo modelo de acumulación
impuesto por Fujimori a comienzos de los 90, que prosigue hasta ahora, seg¡un
el Presidente: No es sino concentrar en manos de los explotadores la mayor
cantidad de medios de explotación despojando a los pequeños y medianos
propietarios y arrebatándose entre sí, incluso hasta parte de la propiedad de
ellos mismos; aumentar y concentrar más plusvalía, bajando salarios; apropiarse
de medios productivos estatales que serían más de 5,000’000 de dólares, según
la Universidad del Pacífico. Para ese modelo nuevo pone énfasis en el
crecimiento económico que no es sino el mandato de la Cepal. En cuanto a empleos insisten en la
pequeña y mediana producción, es el mandato del imperialismo.
Con su estrategia de desarrollo
contempla (Fujimori, la CEPAL y el imperialismo): “la promoción simultánea del
crecimiento, insertado desde un inicio en la estrategia de desarrollo de los
sectores modernos, política de incentivos al sector exportador, la inversión
extranjera y el desarrollo industrial. En los sectores tradicionales e
informales se fomentará el desarrollo de la micro y pequeña empresa y la
creación de mercados rurales así como la industrialización rural. Se
privilegiará el rol del mercado. El Estado estará llamado a desempeñar un rol
orientador, se busca revertir una estructura proteccionista vinculada a la sustitución de importaciones.
Acabaremos con el sesgo anti-exportador, con las bajas tasas de inversión
agrícola, con los subsidios al capital y con el sesgo pro-urbano y antirural”. En los llamados sectores modernos
busca producir para exportar; inversión extranjera, será altamente favorable al
imperialismo, ¿de qué desarrollo industrial hablan si no tienen producción de
energía, la cual es necesaria para impulsar un desarrollo industrial? ¿cómo
está la única siderúrgica que hay? ¿cómo está la petroquímica?; tienen un
sistema financiero caduco, un sistema comercial atrasado y un sistema agrícola
que no satisface las necesidades del pueblo; produce para exportar y la base
productiva misma está hundida. Por tanto, palabras.
Se
ha cumplido la predicción científica marxista-leninista-maoista del Presidente Gonzalo contra el plan del
fascista, genocida y vendepatria Fujimori de reimpulsar el capitalismo
burocrático. Ha fracasado totalmente como lo demuestra el informe que acabamos
de ver sobre la situación actual ( a 2020) de las Mipymes ALC y que abarca el
caso del Perú.
Luego vienen los anexos correspondientes a esta parte
.....