Saturday, October 5, 2024

NOTAS Y MATERIALES SOBRE EL PERÚ CONTEMPORÁNEO (III, continuación a.)

 

Este cuadro corresponde a la entrega que antecede a la presente:

“Capítulo I.-  5. Inversión extranjera directa por país de origen



 La Inversión Extranjera Directa en América Latina y el Caribe • 2024 de la CEPAL, institución de la ONU. El informe antes referido,  confirma cual es el imperialismo principal que nos domina, el imperialismo yanqui, a través de la inversión extranjera directa (IED), una de las formas que toma la exportación de capitales de los países imperialistas a las naciones oprimidas. Y, también confirma el papel destacado de China en el comercio (exportació/importación de mercancías) con América Latina y su lugar secundario en la IED, una de las formas principales que asume la exportación de capitales en la etapa imperialista.  


Prosiguiendo con nuestras NOTAS Y MATERIALES SOBRE EL PERÚ CONTEMPORÁNEO, con los comentarios el informe: La Inversión Extranjera Directa en América Latina y el Caribe • 2024 de la CEPAL, institución de la ONU.

Con la base teórica precedente, nos ocupamos de la inversión extranjera directa en nuestro país a propósito del informe ya señalado al inicio: La Inversión Extranjera Directa en América Latina y el Caribe • 2024 de la CEPAL, institución de la ONU. El informe del instituto económico imperialista CEPA, parte reconociendo la crisis generalizada por la que atraviesan los países de América Latina y por lo tanto el Perú, al respecto dice:

 

“El informe La Inversión Extranjera Directa en América Latina y el Caribe en su edición 2024 se presenta en un momento sumamente desafiante, ya que América Latina y el Caribe se encuentra en una crisis del desarrollo que se expresa en tres grandes trampas: una trampa de baja capacidad para crecer, caracterizada por un crecimiento económico bajo, volátil, excluyente y no sostenible, una trampa de alta desigualdad, con baja movilidad y cohesión social y una trampa de baja capacidad institucional y de gobernanza poco efectiva” (del Resumen Ejecutivo del Informe).

 

Otro informe del mismo instituto, dice:

 

“En el transcurso de la última década, los países de América Latina exhibieron un bajo nivel de crecimiento económico, con una tasa promedio del 0,9% en el período 2015-2024, inferior a la del 2,0% registrada en la llamada “década perdida” de 1980. Dinamizar el crecimiento constituye una tarea primordial para que la región pueda responder a los desafíos ambientales, sociales y laborales a los que se enfrenta en la actualidad (…)”

 

El mismo que remata:

 

“ El escenario macro-económico al que se enfrentan los países de la región, tanto en el plano externo como en el interno, se caracteriza por el bajo crecimiento de la actividad económica, la incertidumbre y un espacio limitado en el ámbito de las políticas fiscales y monetarias” (Estudio Económico de América Latina y el Caribe • 2024 Resumen ejecutivo).

 

Está claro, de acuerdo a este instituto imperialista que establece las directrices de política económica para América Latina y el Caribe, que ni  siquiera hablan de desarrollo económico, sino simplemente de “crecimiento de la actividad económica” y dicen que este “crecimiento...” en el período anterior ha  sido inferior al de la década pérdida de 1980. Dónde esta pues el desarrollo económico “capitalista” de que habla la LOD, es imposible porque lo que se desenvuelve, como dice el Presidente Gonzalo, sobre la base semicolonial y semifeudal, es el capitalismo burocrático como el camino dominante que imprime el imperialismo en nuestros países.

A partir de aquí proseguimos con el tema:

 

 Esta  mayor “crisis de desarrollo” a partir de los 80 hasta la actualidad se ha dado en el marco de la llamada “apertura económica” y el récord de exportación de capitales hacia América Latina desde mediados de los 90 hasta su caída registrada desde  la segunda década del presente siglo y recuperación a partir de la presente década. Ver cuadro al respecto:

 


Lo que llaman “crisis de desarrollo”, no es otra , pues, que la crisis de la sociedad semicolonial, semifeudal sobre la cual se desenvuelve un capitalismo burocrático al servicio del imperialismo, principalmente yanqui y de su superestructura, principalmente del viejo Estado terrateniente-burocrático. ¿Quiénes son los culpables de esta situación?  Las tres montañas que explotan y oprimen al pueblo: el imperialismo, el capitalismo burocrático y la semifeudalidad.

 

Pese a la relación irrefutable de dominación imperialista- exportación de capitales- saqueo  y atraso y crisis de nuestros países, el Informe, trata de sembrar ilusiones en lo beneficioso que puede ser la IED imperialista si se sabe aprovecharla; cuando, como ya hemos adelantado, sabemos que el desenvolvimiento del capitalismo burocrático al servicio del imperialismo y sus lacayos mediante la-  inversión imperialista (exportación de capitales), es contrario al desarrollo nacional. Este hecho se expresa precisamente en lo que ellos llaman las “tres grandes trampas”, esto es mayor atraso, con ciclos de crecimiento económico de las exportaciones y de los grandes indicadores económico, para luego caer más hondo, pero sin verdadero desarrollo económico; lo que ellos mismos han bautizado como “tres décadas pérdidas” (1980-2020), “crecimiento sin desarrollo”, “países con una economía heterogénea, con islas de modernidad”, “des-industrialización y reprimarización”, “marcha atrás en el combate a la pobreza”, etc. Citamos el párrafo del Informe antes comentado:

 

 “En este contexto, analizar las dinámicas de la inversión extranjera directa (IED) en la región y cómo estas se vinculan con las políticas de desarrollo productivo es clave para diseñar políticas que permitan aprovechar del mejor modo posible el potencial que tienen las inversiones de empresas transnacionales para apoyar a que los países y sus territorios enfrenten la trampa de bajo crecimiento”.

En relación a la IED y Desarrollo sostenido, punto B., como confesión de parte, el informe dice:

“Específicamente (...), la IED está llamada a desempeñar un papel preponderante en las políticas de desarrollo productivo de los países de América Latina y el Caribe y de sus territorios para abordar el reto estructural del estancamiento, e incluso la disminución, de la productividad. (…) la reprimarización de las décadas de 1990 y 2000, con importantes excepciones, como México y Costa Rica. A pesar de la adopción de políticas de atracción de IED en la región, sus resultados en términos de absorción de tecnología y complejidad económica no han sido lo suficientemente positivos en comparación con los obtenidos en Asia “(Resumen Ejecutivo: B. Políticas para atraer inversión extranjera directa y promover sus efectos positivos en la economía)”.

 

Cuando hablan de la IED y las políticas de desarrollo productivo, resulta contraproducente pues siguiendo este camino nuestras economías no solo se han estancado sino que hasta han retrocedido, ver subrayados de cita anterior.

 

Sobre las “excepciones” a que se refieren confirman el control del imperialismo del proceso económico de nuestros países, el desenvolvimento del capitalismo burocrático al servicio de los intereses imperialistas y el papel de la IED, pero sobre esto volveremos mas tarde cuando veamos los sectores a los que ingresa la IED y otros aspectos de la misma, como las fusiones y adquisiciones, por ejemplo.

 

Pero, hagamos aquí una interpolación, para hablar de la llamada “reprimarización de los 90 y 2000” del informe sobre IED-CEPAL-24 como consecuencia del mayor control de nuestro proceso económico porel imperialismo, principalmente yanqui,con la mayor apertura del país a la inversión extranjera y de la economía en general, tomando el caso del Perú de estudio sobre el desarrollo económico a partir de los 90 ,  citamos lo siguiente:

 

Perfil económico-productivo del país en la actualidad.

La economía tomó un carácter primario exportador: abandonó la industria y la agricultura familiar y de autoconsumo (donde participa alrededor de 30% de la población económicamente activa, PEA), y con ello el mercado interno, apostando por el comercio internacional y las industrias extractivas (minería y agroexportación) y los altos precios de los commodities.

 

Las reformas económicas dieron forma a un nuevo tipo de estructura productiva, empresarial y de poder que Gonzales de Olarte ha llamado “modelo económico: primario-exportador y de servicios (PESER)”.

Dicha estructura se construyó sobre las empresas públicas privatizadas o concesionadas (del sector extractivo, minería e hidrocarburos, y servicios, electricidad y telefonía, entre otros) (…) El PESER es un modelo que no es capaz de crear empleo (para una PEA de más de 16 millones, las extractivas dan cuenta de solo 1.5% de la PEA como empleo directo). Se caracteriza también por un Estado reducido que, en lo económico, cumple un rol subsidiario. El Estado quedó impedido de realizar actividad empresarial (que contribuiría a la soberanía y seguridad alimentaria y energética con una participación en empresas de sectores estratégicos, como puertos, gas, petróleo y aerolíneas, entre otros). La actividad empresarial del Estado quedó limitada a los sectores donde los privados  (los particulares, nota nuestra) no proyectan invertir porque no les resulta rentable.

 

Otro elemento que caracteriza al PESER es que existe una fuerte inversión extranjera de grupos transnacionales, que se van haciendo mayoritarios en varias empresas. Las élites económicas son las extractivas (minería, gas, energía eléctrica y el aparato logístico vinculado al sector exportador y el industrial) y la banca. El banco más importante, el Banco de Crédito del Perú, tiene como principal accionista a Crefast, fondo de inversión norteamericano, con más de 50%; AFPs tienen 12% de las acciones, y 24% está en manos de una offshore panameña. Por su parte, los Romero tienen un porcentaje pequeño de acciones. La economía se ha extranjerizado “a través de inversiones directas de Repsol, Yanacocha, etcétera. O de la compra de acciones de empresas peruanas como Graña y Montero, Ferreyros, Intercorp. Los grupos emergentes tienen más control sobre su propiedad porque son muy renuentes a vender acciones en la bolsa. Saben lo que les va a pasar” (Durand, 2017). (…) han ido generando monopolios y oligopolios en varios sectores. Esto la ha vuelto vulnerable a los vaivenes del comercio internacional, surgiendo economías de enclave con poca conexión interna, y generándose escaso empleo o empleo de baja productividad.

 

La masa de trabajadores desempleados se vio engrosada por trabajadores despedidos por cierre de fábricas entre los años setenta y noventa (de los sectores de cueros, ensamblaje de autos, textiles y empresas públicas privatizadas, entre otros) y por el creciente ingreso de los jóvenes al mercado de trabajo. La alternativa serán los pequeños negocios urbanos (principalmente en comercio y servicios). Así, se irá configurando una estructura empresarial creciente, conformada principalmente por micro y pequeñas empresas (mypes) 5(…)

se produjo a partir de los años setenta y, de manera aguda, en los ochenta (durante el conflicto armado interno): un proceso de migración sin industrialización que perjudicó al campo,(…) el predominio del empleo informal sobre el formal. En el año 2007, la tasa de empleo informal ascendía a 79.9%, mientras que el empleo formal era de tan solo 20.1%; una década después, la variación es poca: la tasa de empleo informal es de 72% y la de empleo formal de 28%. La informalidad en el empleo tiene que ver con la estructura empresarial predominantemente microempresarial, que, como se ha visto líneas arriba, desarrolla sus actividades en condiciones precarias y –por lo mismo– tiene una alta tasa de mortalidad.(...)

 

Las condiciones de inserción en el mercado de trabajo o la imposibilidad de hallar trabajo derivan en la migración (Cuadro 8). Para 2017, habían emigrado 3,583,219 peruanos al exterior, lo que representa 11.1% de la población en 2018, 32,162,184 habitantes según las estimaciones. Del total de migrantes, 88.1% (3,157,876 personas) tenían entre 20 y 69 años de edad. 6 Se puede señalar que la mayoría de los peruanos migra para trabajar y desarrollarse laboralmente, lo que, a su vez, les permite enviar recursos (remesas) a sus familias en Perú. Las remesas enviadas por los peruanos en el exterior sumaron 3,051 millones de dólares, lo que representa 1.4% del PIB y un incremento de 6% en las remesas respecto del año anterior(BCR, 2016)” (de: Los desafíos de la transformación productiva en América Latina, Perfiles nacionales y tendencias regionales, Tomo 1: Región Andina, Friedrich-Ebert-Stiftung, CAPÍTULO V Perú —luis ángel rodríguez salcedo).

 

Y, preguntamos: ¿quién nos ha traído hasta esta situación de mayor atraso, como admite el informe?, ¿quiénes son los responsables?, las tres montañas que explotan y oprimen al pueblo: el imperialismo, el capitalismo burocrático y la semifeudalidad. Luego pues, la IED es la causa y no la solución. La solución es destruir las tres montañas mediante la guerra popular para culminar la revolución democrática y pasar de inmediato a la revolución socialista.

 

La IED como una de las formas de exportación del capital imperialista a nuestros países no viene a traernos progreso, desarrollo económico, como ya lo hemos dicho, sino para controlar el proceso económico de nuestro país y chupar la sangre de nuestro pueblo.

 

Como se dijo a comienzos de los 1960: “de América Latina fluye hacia los Estados Unidos un torrente continuo de dinero: unos cuatro mil dólares por minuto, cinco millones por día, dos mil millones por año, diez mil millones cada cinco años” ( Segunda Declaración de la Habana, 04 de febrero de 1962). Eso solo calculando el flujo hacia los EEUU sin considerar el resto. Luego, el economista Carlos Malpica en su libro El Mito de la Ayuda Exterior, a mediado de esa década, calculó que por cada dólar que viene ( considerando las diversas formas de la exportación de capitales imperialistas, que ingresan al país) se nos van de 3 a 4 dólares. 


En los 70, ver “Voz Popular” sobre el Reajuste General Corporativo 1977, en el cual se cita el número 3 de “VP” de 1972.  Se dijo sobre la exporatción de capital imperialista a nuestro país, en sus variadas formas,,que es, “un aparente ingreso de financiación y en realidad un gran saqueo; y siguiendo vigente la norma de que por cada dólar que ingresa a América Latina los imperialistas sacan cuatro, evidentemente esta fuente de financiación no es tal sino raíz de opresión nacional, de explotación y saqueo imperialistas...Por este camino de aporte financiero imperialista, privado (ahora decimos particular, porque el estatal también tiene el carácter privado) o estatal, el país solo remacha su sujeción y el dominio colonial yanqui en especial” . Como dijimos, citado de Voz Popular Nt. 3,de 1972”.

 

 Proseguiremos con estos comentarios en próxima entrega.