La demostración de Lenin-Liebknecht-Luxemburg de este año estuvo marcada por dos hechos políticos sobresalientes:
Primero, se llevó a cabo en un clima de caza de brujas y terror blanco, el movimiento revolucionario en Alemania ha enviado una señal clara. ¡No nos dejamos intimidar! ¡Llevamos nuestras banderas con orgullo y en medio de la lucha estamos unidos contra este Estado, sus lacayos y espías!
En segundo lugar, cada vez está más claro que la reconstitución del Partido Comunista de Alemania es una necesidad urgente de la lucha de clases del proletariado. En diferentes bloques se expresa el clamor por el partido y se vuelve cada vez más claro cómo esta exigencia encuentra formas cada vez más organizadas y centralizadas. Está claro para todos y cada uno que la cuestión hoy no es: si el partido se reconstituye, sino cómo, sobre qué base y cuándo.
Esta es la principal conclusión que pueden sacar los revolucionarios de la manifestación de este año. Sobre el transcurso de la manifestación en sí, y sobre todo, sobre la participación de los camaradas que son, de hecho, la vanguardia en la lucha por la reconstitución del partido, ciertamente tendremos algo que informar gráficamente en el futuro cercano.
Escrito por phle
15 de enero de 2018