¡VIVA LA
EMANCIPACIÓN DE LA MUJER EN EL CURSO DE LA REVOLUCIÓN DE NUEVA DEMOCRACIA!
El
papel de la mujer, ideológicamente consciente, está ligado a la transformación
revolucionaria de la vieja sociedad. Es imposible pensar que, desde el
feminismo burgués, aquel que pretende colocar a la mujer al mismo nivel que el
de los hombres en una sociedad diseñada, precisamente, para discriminarla y
explotarla en todos los sentidos, pueda aportar a su emancipación.
No
podemos bregar por acceder a ser empresarias, policías, militares, deportistas,
docentes, asambleístas, presidentas, etc., si esto nos ata a la vieja sociedad,
porque esa aspiración lo único que consigue es perfeccionar la vieja
democracia, la vieja sociedad, que más allá de la reforma, refiere ser
destruida totalmente y, sobre sus ruinas, podamos construir una nueva sociedad
cuyo peso descanse proporcionalmente en los hombros de mujeres y hombres
convictos de la ideología, la clase y del pueblo.
Si
queremos conmemorar el día de la mujer trabajadora: ¡LUCHEMOS!, pero no solas,
sino junto a aquellos hombres que, desde la ideología del proletariado,
comparten nuestros verdaderos sueños de emancipación, de libertad, que están
refrendados únicamente en la transformación violenta de esta sociedad añeja,
caduca, incompatible con nuestros sueños y propósitos que no son ajenos al de
todos los oprimidos y explotados del país y del mundo.
¡POR
UN 8 DE MARZO ORGANIZATIVO, CONSCIENTE Y COMBATIVO!
¡VIVA
EL DÍA DE LA MUJER TRABAJADORA!
¡VIVA
LA EMANCIPACIÓN DE LA MUJER EN EL CURSO DE LA REVOLUCIÓN DE NUEVA DEMOCRACIA!
¡ORGANIZAR,
COMBATIR Y RESISTIR!