Hemos dicho
todo este tiempo que la actual crisis económica y política de Venezuela es
consecuencia de la aplicación de los planes del régimen de Chávez y, ahora,
Maduro de profundizar el capitalismo burocrático e impulsar la reestructuración
corporativa fascista del Estado venezolano. Esto ha llevado por un lado, a la
agudización de las contradicciones entre las dos facciones de la gran burguesía
del país, clase lacaya del imperialismo, esto es, entre la facción burócratica,
en el gobierno, y la facción compradora, en la oposición; y , por el otro lado,
a golpear con sus planes y disputas al pueblo venezolano, esto lleva,
necesariamente, a la agudización de la lucha de clases de las masas.
Es
necesario, tener presente, que ante la ausencia de un verdadero Partido
Comunista, el oportunismo y el revisionismo han servido para arrastrar a parte
de las masas trás de la facción burocrática, con el cuento del “progresismo” y “nacionalismo”
del régimen pro-imperialista y , ahora, también, parte de ese mismo revisionismo y oportunismo, busca
jalar a las masas tras la otra facción de la gran burguesía, la compradora, con
el cuento de la “defensa de la constitución” y la “democracia”. Cuán rídiculos
son estos “democrátas”, que en nombre de la democracia burguesa reaccionaria
están por la defensa de la constitución corporativa-fascista de 1999 hecha
aprobar por el régimen actual.
A las masas
corresponde luchar por la defensa de sus derechos y contra la brutal descarga
de la crisis con más hambre, miseria, desocupación y represión que hace el
régmen fascista como parte de sus medidas económicas anticrisis y su reajuste
general corporativo (ANC), corresponde al proletariado y su partido ,
impulsando su proceso de reconstitución, pugnar por dirigir a las amplias masas
populare luchando independientemente por sus intereses de clase, aclarando el
carácter de clase de esta pugna reaccionaria, senalando que ambas facciones
representadas por gobierno y oposición son lacayas del imperialismo, que tanto
la asamblea constituyente corporativa del régimen como el parlamento
reaccionario representan los intereses de clase reaccionarios, que lo corresponde
es luchar por la revolución de nueva democracia para acabar con el
imperialismo, la semifeudalidad y el capitalismo burocrático. Corresponde
elevar más la consigna ¡Yanquis go home!
Que el proletariado y el pueblo de Venezuela deben rechazar la intervención del
imperilismo yanqui -y de todos los otros imperialistas, como los de la UE,
China, Rusia, etc.- en los asunto internos de Venezuel.
Denunciar
que el régimen “bolivariano” ha vendido su alma al diablo al profundizar el
capitalismo burocrático, el viejo camino de las clases reaccionarias y
pro-imperialistas en Venezuela, bajo el nombre de “Nuevo Modelo” y está en
peores condiciones frente al imperialismo yanqui, a su intervención . “Nuevo
Modelo” basado en la explotación y renta del petróleo, con lo cual el gobierno
chavista está reconociendo su sujeción y sometimiento a los intereses del
imperialismo principalmente yanqui, que ha sido y sigue siendo el principal
beneficiario de la producción de hidrocarburos del país y mantiene así su
control estratégico y por tanto su capacidad de intervención en los asuntos
internos de Venezuela, hoy es mayor que antes de Chávez. Como lo prueba las
sanciones impuestas a los funcionarios del régimen chavista como un anticipo y
queda como una “espada de Damoclés” el uso que puede hacer el imperiqalismo
yanqui de poner fin al negocio petrolero con Venezuela.
Como lo
dijo Lenin en sus diferentes escritos sobre el imperialismo, refiriendose al
poder colonial inglés sobre la India, etc., que el hecho de que otras potencias
imperialistas penetren en el mercado de las colonias británicas no signiofica
que estan haya dejado de ser colonias británicas, sino, que estas potencias
imperialistas están en condiciones de penetrar en el mercado de las colonias
británicas. Así, el hecho de que otras potencias imperialistas hayan penetrado
cada veuz más y más en Venezuela, no significa que el imperialismo yanqui haya
dejado ser el imperialismo principal que oprime al pueblo de Venezuela.
Nosotros
rechazamos la intervención del imperialismo yanqui en los asuntos internos de
Venezuel y llamamos a empunar en todas las movilizaciones y propganda la
consigna. ¡Fuera Yanquis de Venezuela y América Latuina y del Mundo entero! ¡Yanquis
go home!
Seguidamente
publicamos la noticia aparecida en el períodico reaccionario alemán Frakfurter Allgemeine
del dúia de hoy
Socios
comerciales de Venezuela
Petróleo
venezolano contra la lealtad
Washington,
critica a Maduro, sin embargo no se anima a poner fin al negocio petrolero con
su régimen. Otros países americanos se muestran desunidos en cuanto a lo que
corresponde hacer con Venezuela.
02.08.2017,
por Matthias Rüb, São Paulo
http://www.faz.net/ Frankfurter Allgemeine, 04
de Agosto de 2017
Si los
campos políticos de Venezuela se enfrentan en una hostilidad irreconciliable,
¿pueden las potencias competentes de la región hacer algo para evitar una nueva
escalada de la violencia y posiblemente un retorno a las condiciones
democráticas? Washington juega un papel clave. No sólo porque Estados Unidos es
el país más fuerte del hemisferio occidental y siempre ha sido el Poder rector
regional. Sino, principalmente porque Washington
es el mayor receptor de exportaciones de petróleo venezolano con un volumen de
alrededor de 750.000 barriles diarios. Esto representa sólo el diez por ciento
de las importaciones totales de petróleo de los Estados Unidos. Pero una súbita
eliminación del petróleo pesado y con alto contenido de azufre de Venezuela,
por el procesamiento de que muchas refinerías americanas en el Golfo de México
están especializadas, conduciría a un notable aumento en el precio de la
gasolina en los Estados Unidos.
El poder
petrolero venezolano, que debe tener las reservas de petróleo probadas más
grandes del mundo, actualmente produce sólo 1,97 millones de barriles de petróleo
por día. Este es el nivel más bajo en 14 años. La petrolera estatal altamente
endeudada, PDVSA, carece de fondos para las inversiones atrasadas, y sólo en
octubre y noviembre debe pagar 3,2 mil millones de dólares en vencimientos de
deudas. Con la exportación de petróleo, Venezuela genera cerca del 95 por
ciento de sus ingresos en divisas y cerca de la mitad de sus ingresos
estatales. La mayoría de los ingresos petroleros provienen a Caracas de los
Estados Unidos actualmente; en la actualidad alrededor de 900 millones de dólares.
Con el petróleo restante, que exporta Venezuela a los aliados China y Rusia, el
gobierno de Caracas tiene que pagarles deudas pendientes. Finalmente, envió
petróleo a precios significativamente reducidos a Cuba - su poder de protección
comunista - a pequeños Estados del Caribe, cuya lealtad política compra Venezuela.