Año XVI, nº
204 - 2ª quincena de febrero de 2018
Celebrar
los 170 años del Manifiesto del Partido Comunista
Karl Marx
En el
presente mes de febrero de 2018, se cumplen exactamente 170 años de la primera
publicación del Manifiesto del Partido Comunista, escrito por Carlos Marx y
Federico Engels. En este mismo año, el Movimiento Comunista Internacional (MCI)
y las masas de todo el mundo celebran los 200 años de nacimiento del gran
Carlos Marx. Esta grandiosa fecha es una importante ocasión para reafirmar la
plena vigencia de los principios establecidos en esta obra monumental para el
proletariado del mundo entero.El Manifiesto estableció por primera vez los
principios fundamentales y el programa del proletariado internacional, por
medio del cual se alzó su Partido, construido a su imagen y semejanza, como
partido independiente y opuesto a todos los demás partidos en la historia, el
Partido Comunista. Por eso, es también la partida de nacimiento del Movimiento
Comunista Internacional y su base de unidad más fundamental.Los principios
establecidos por el Manifiesto de 1848 son inmortales e imprescindibles para
los comunistas, "son los principios y programa desplegados por el
proletariado internacional, que llevarán a la humanidad a un nuevo mundo, a una
sociedad sin clases, al comunismo. El nacimiento del Movimiento Comunista
Internacional ha cambiado para siempre la faz del mundo y el curso de la
historia de la humanidad.Basados en estos principios fundamentales, el
proletariado internacional ha desarrollado tres grandes etapas, el
marxismo-leninismo-maoísmo. Tres altas cumbres que abrieron una Nueva Era con
la Gran Revolución Socialista de Octubre de 1917, elevando el proletariado al
equilibrio estratégico con la victoria de la Gran Revolución China de 1949, y
que en torno a los años 1980, con la Guerra Popular en Perú, avanzó a su etapa
de ofensiva estratégica, ofensiva que necesita ser impulsada con más y más
guerras populares en todo el mundo, para oponer a la guerra imperialista
mundial la guerra popular mundial, y barrer el imperialismo de la faz de la
tierra.
Todos los
revisionistas en la historia, desde Bernstein y Kautsky hasta Avakian, tuvieron que
dispararse contra el Manifiesto. Kruschev en el XXII Congreso del PCUS, en
1961, afirmó que éste era el nuevo "Programa de los comunistas", y
Avakian, afirmó que su "Nueva Síntesis" era el "nuevo Manifiesto
del siglo XXI".Por eso, al celebrar los 170 años de la publicación del
Manifiesto, partimos de la necesidad, planteada por el Presidente Gonzalo de
estudiarlo en su totalidad, incluyendo todos los prefacios y notas establecidos
desde su primera publicación en 1848, hasta el último prefacio escrito por
Engels en 1893, que además de ser una importante guía para estudiar su cuerpo
fundamental (el texto lanzado en 1848), también sirven a complementar el cuerpo
principal y aplastar las posiciones revisionistas, academicistas y otras
desviaciones. Por eso, con esa importante definición, el Presidente Gonzalo
eleva la comprensión de que todos los prefacios y notas de Marx y Engels son
también parte del propio Manifiesto.Conforme fue resaltado por Marx y Engels,
en el prefacio a la edición alemana de junio de 1872, la aplicación y vigencia
de los principios fundamentales expuestos en el Manifiesto, establecen la
necesidad de su aplicación creadora en cada época (hoy
Marxismo-leninismo-maoísmo) y en cada país, necesidad de pensamiento-guía):
"la aplicación práctica de estos principios dependerá siempre y en todas
las partes de las circunstancias históricas existentes, y que, por lo tanto, no
se concede importancia exclusiva a las medidas revolucionarias enumeradas en el
capítulo II.".Una importante cuestión que aún debe ser resaltada, y que se
trata de materia de gran importancia para el MCI, que es parte del
Manifiesto, el prefacio de 1883 de
Engel, al referirse a la idea
fundamental del Manifiesto, definió el papel de jefe de Marx, al afirmar
que "esta idea fundamental pertenece única y exclusivamente a Marx. Yo lo
declaro a menudo, pero justamente ahora es necesario que esta declaración
figure en la cabeza del propio Manifiesto. ".
Con razón
Engels afirmó en el prefacio de la edición inglesa de 1888 que: "La
historia del 'Manifiesto' refleja en gran medida la historia del movimiento
moderno de la clase obrera.El Manifiesto del Partido Comunista fue escrito por
Marx y Engels entre diciembre de 1847 y enero de 1848, por encargo de la Liga
de los Comunistas, una organización obrera internacional clandestina, que les
encargó de redactar un programa teórico y práctico para ser publicado. Fue
publicado por primera vez en febrero de 1848 en Londres, Inglaterra, y luego
fue traducido a cientos de idiomas, reproducido millones de veces,
convirtiéndose en el documento político más importante de toda la historia.El
Manifiesto es el primer gran acontecimiento de la historia del movimiento
proletario, pues con él, por primera vez, la clase más revolucionaria de la
historia, se dotó de un programa de pensamiento y acción definitivo para
transformar todo el mundo, emanciparse a sí misma como y con ello emancipar a
toda la humanidad.Engels resalta en el prefacio a la edición inglesa de 1888,
que la derrota del proletariado en las Jornadas de Junio de 1848 (primera
gran batalla entre el proletariado y la burguesía), pocos meses después de la
publicación del Manifiesto, relegó a segundo plano, por cierto tiempo, las
aspiraciones sociales y políticas de la clase obrera europea. Y posteriormente,
cuando el Comité Central de la Liga de los Comunistas fue arrestado y condenado
por la reacción prusiana en el famoso proceso de Colonia de 1852, siendo la
Liga desorganizada, se abrió un período de dispersión del proletariado.
Fueron
necesarias décadas de luchas para que el proletariado recobrara sus fuerzas
para una nueva envestida contra la burguesía. Fueron duros años de combate para
que, por medio de su experiencia revolucionaria directa y en dura lucha contra
todas las concepciones extrañas a la clase, el proletariado levantara el
Manifiesto, haciéndole volver a emerger y demostrando su vigencia, como base de
unidad y programa único del proletariado, en torno al cual los comunistas
pudieron reorganizarse y reunificarse en las décadas siguientes.
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"Los
obreros de 1874, en la época de la disolución de la Internacional, ya no eran
ni mucho menos los mismos de 1864, cuando la Internacional fue fundada. El
prodhonismo en Francia y el lasalleanismo en Alemania agonizaban (...) En
efecto, los principios del 'Manifiesto' se difundieron definitivamente entre
los obreros de todos los países. Así, pues, el propio 'Manifiesto' se situó de
nuevo en el primer plano.En el prefacio a la edición alemana de 1890, Engels,
resalta, como el proletariado de Europa y América del Norte se había unido en
torno a los principios establecidos por el Manifiesto y, organizados en la
Asociación Internacional de los Trabajadores se habían constituido "como
un único ejército, la misma bandera y para un mismo objetivo inmediato: la
jornada de ocho horas, proclamada ya en 1886 por el Congreso de la
Internacional (...) ¡Ah, si Marx estuviera a mi lado para verlo con sus propios
ojos! ".En el prefacio a la edición alemana de 1883, el primero desde la
muerte de Marx, Engels realiza una brillante síntesis de la "idea
fundamental presente en el Manifiesto", el materialismo histórico
dialéctico, el reconocimiento de la lucha de clases como motor de la historia:
"que la la producción económica y la
estructura social que de ella deriva necesariamente en cada época histórica
constituyen la base sobre la que descansa la historia política e intelectual de
esa época; que, por lo tanto, toda la historia (desde la disolución del régimen
primitivo de propiedad común de la tierra) fue la historia de la lucha de
clases, de la lucha entre las clases explotadoras y explotadas, dominantes y dominadas,
en las diferentes fases del desarrollo social; y que ahora esta lucha ha
llegado a una fase en que la clase explotada y oprimida (el proletariado) ya no
puede emanciparse de la clase que lo explota y oprime (la burguesía), sin
emancipar, al mismo tiempo y para siempre, la sociedad entera de la
explotación, de la opresión y de las luchas de clases ".
El
Manifiesto demuestra que, en esta época, el capitalismo simplificó todas y cada
una de las contradicciones de clase en "dos grandes clases, que se
enfrentan directamente: la burguesía y el proletariado", estableciendo el
gran principio de la lucha de clases como principio fundamental en el cual
todos debemos guiarnos, cabiendo a todos los hombres y mujeres tomar posición
por una de las clases opuestas. Con ello, Marx acertó un golpe mortal en todas
las variantes del socialismo pequeño burgués, cristiano, que se presentaban
como corrientes independientes y reconciliadoras del antagonismo de clase.
Portada de
la publicación inicial del Manifiesto Comunista en febrero de 1848 en Londres.
Al
establecer esta comprensión científica del socialismo, en el Manifiesto se
estableció el importante principio de la inevitabilidad del socialismo y del
comunismo: "la burguesía produce ante todo sus propios sepultureros. Su
hundimiento y la victoria del proletariado son igualmente inevitables.
"(Capítulo 1, negritas nuestro). "Las armas de que se sirvió la
burguesía para derribar el feudalismo se vuelven ahora contra de la propia
burguesía. Pero la burguesía no forjó solamente las armas que deben darle
muerte, produjo también a los hombres que empuñarán estas armas: los obreros
modernos, los proletarios! ".
Engels,
al explicar la historia del Manifiesto, y de que en este se acuñó para
siempre el título de Comunista y no socialista, nos demuestra con
claridad, cómo deben los comunistas tomar posición de clase por
la izquierda y no por la derecha, practicar el marxismo y no el revisionismo.
Engels nos dice que en 1847 los que se llamaban socialistas eran entonces "respetables" teóricos de las más diferentes corrientes más o menos charlatanes, que se hallaban fuera del movimiento obrero y que buscaban apoyo de las clases "instruidas" predicando la conciliación de clases y que "Parte de la clase obrera que había llegado al convencimiento de la insuficiencia de las simples revoluciones políticas y proclamaba la necesidad de una transformación fundamental de toda la sociedad, se llamaba entonces comunista. Era un comunismo tosco y rudimentario, puramente instintivo, (...) Así era el socialismo en 1847, un movimiento de la clase burguesa y el comunismo de la clase obrera. El socialismo era, al menos en el continente, cosa "respetable"; y el comunismo, todo lo contrario. Y como nos manteníamos desde un principio de que 'la emancipación de la clase obrera debe ser obra de la propia clase obrera', para nosotros no podía haber duda alguna sobre cuál de las denominaciones procedímos a elegir. Más aún, nunca se nos ocurrió renunciar a ella". (Engels, prefacio la edición inglesa de 1888, subrayado nuestro).
Engels nos dice que en 1847 los que se llamaban socialistas eran entonces "respetables" teóricos de las más diferentes corrientes más o menos charlatanes, que se hallaban fuera del movimiento obrero y que buscaban apoyo de las clases "instruidas" predicando la conciliación de clases y que "Parte de la clase obrera que había llegado al convencimiento de la insuficiencia de las simples revoluciones políticas y proclamaba la necesidad de una transformación fundamental de toda la sociedad, se llamaba entonces comunista. Era un comunismo tosco y rudimentario, puramente instintivo, (...) Así era el socialismo en 1847, un movimiento de la clase burguesa y el comunismo de la clase obrera. El socialismo era, al menos en el continente, cosa "respetable"; y el comunismo, todo lo contrario. Y como nos manteníamos desde un principio de que 'la emancipación de la clase obrera debe ser obra de la propia clase obrera', para nosotros no podía haber duda alguna sobre cuál de las denominaciones procedímos a elegir. Más aún, nunca se nos ocurrió renunciar a ella". (Engels, prefacio la edición inglesa de 1888, subrayado nuestro).
En el
Manifiesto, Marx establece el fundamento de la concepción de clase del marxismo
según la cual, el Poder político (Estado) "es la violencia organizada de
una clase para la opresión de otra".Marx demostró que el desarrollo de la
lucha de clases conduce a la revolución y a la dictadura del proletariado a través
de la violencia revolucionaria en la que "el proletariado, derribando por
la violencia a la burguesía, implanta su dominación".Luego, estableció de
forma cabal la violencia revolucionaria para transformar todo orden social,
como un principio fundamental del marxismo:
"Los
comunistas consideran indigno ocultar sus ideas y propósitos. Proclaman
abiertamente que sus objetivos sólo pueden ser alcanzados derrotando por la
violencia todo el orden social existente. Que las clases dominantes tiemblen
ante una Revolución Comunista. "(Capítulo IV, negrito nuestro).
En el
prefacio de la edición alemana de 1872, Marx y Engels, incorporan al Manifiesto
la experiencia desarrollada por el proletariado entre los años de la
publicación del Manifiesto (1848) y 1872, especialmente aquella en la que el
proletariado fue elevado al Poder Político por dos meses, en la Comuna de
París, en 1871, hecho histórico y trascendental en la historia del movimiento
proletario.
Basado en
el balance establecido por Marx en el documento Guerra Civil en Francia (1871),
el principio de la dictadura del proletariado se incorpora al
Manifiesto:"La Comuna demostró, sobre todo que" la clase obrera no
puede simplemente tomar posesión de la máquina estatal existente y ponerla en
marcha para sus propios fines ", refiriéndose al paso de la Guerra Civil
en Francia, en el que Marx afirma que esta maquinaria debe ser roto.En el
Manifiesto, Marx demostró que el proletariado está condenado a unirse, mientras
que "la burguesía vive en lucha permanente". Así estableció la ley
según la cual el "verdadero resultado de sus luchas no es el éxito
inmediato, sino la unión cada vez más extensa de los obreros", en su
proceso de lucha por su partido político independiente - hoy, lucha por la
constitución o reconstitución de los partidos comunistas maoístas
militarizados- es una "lucha incesante" que por más que sea socavada:
"surge de nuevo, siempre más fuerte, más firme, más fuerte,"
(capítulo I).
EL
INTERNACIONALISMO PROLETARIO
Marx
estableció en el Manifiesto, el principio del internacionalismo proletario
afirmando que "El proletariado no tiene patria", estableciendo
también el gran lema que guía al proletariado desde hace 170 años:
"Proletarios de todos los países, uníos", gran tarea que nos lego y
que sólo se concluirá al entrar todos en el comunismo, cuando el proletariado
haya cumplido su papel histórico, aboliendo toda propiedad privada, todas las
clases sociales y las diferencias de clase, extinguiendose el Estado y a si mismo
como clase.
"En la
lucha contra la burguesía el proletariado se constituye indefectiblemente en
clase, mediante la revolución se convierte en clase dominante y, como clase
dominante, suprime por la fuerza las viejas relaciones de producción, suprime al
mismo tiempo que estas relaciones de producción las condiciones para la la
existencia del antagonismo de clase y de las clases en general y, por tanto, su
propia dominación como clase. En el lugar de la antigua sociedad burguesa, con
sus clases y sus antagonismos de clase, surgirá una asociación en la que el
libre desarrollo de cada uno será la condición del libre desarrollo de todos
"(cap.1)
Por lo
tanto, este gran lema tiene un importante significado, porque es a la vez
síntesis y guía. Síntesis porque expresa nuestra concepción de mundo, apuntando
a nuestra meta final, el comunismo, y guía porque resume las tareas actuales
del combate a la dispersión de fuerzas en el MCI que avanza en marcha forzada
hacia su superación.
Los
comunistas, como parte de una misma clase a nivel mundial que tiene un destino
común indisolublemente soldado, conciben que el comunismo no puede darse en un
sólo país, a él entramos todos, o no entra nadie, por lo tanto, como afirmó el
Presidente Gonzalo "no se es comunista si no se piensa en el comunismo
"(3) lo que nos demanda" poner el internacionalismo proletario como
mando y guía ", concretando lo establecido por el Presidente Mao:" El
internacionalismo es el espíritu del comunismo "(4).
En este
año, los Partidos y Organizaciones marxistas-leninistas-maoístas, unidos bajo
la bandera del maoísmo y la Guerra Popular lanzaron la Campaña Mundial por los
200 años del nacimiento del gran Karl Marx, bajo la consigna: ¡Proletarios de
todos los países, uníos!
Esta
importante Campaña Mundial se suma y forma parte de la lucha por la
reunificación de los comunistas en el mundo, y contra el revisionismo, cuyo
objetivo inmediato anunciado es la realización de una Conferencia Internacional
Maoista Unificada, que establezca una nueva organización internacional maoísta.
Este paso significará un salto en la lucha por la reconstitución de la
Internacional Comunista.
La
reconstitución de la Internacional Comunista, que tiene como base a las Guerras
Populares en curso, destacadamente las Guerras Populares en el Perú y en la
India, en las que se está construyendo el nuevo Poder, a las cuales se
suman las Guerras Populares en Filipinas
y Turquía y demás luchas de la liberación nacional, y los procesos de reconstitución de los partidos comunistas
marxistas-leninistas-maoistas militarizados en todo el mundo, para iniciar la
Guerra Popular en cada país como parte y al servicio de la Revolución
Proletaria Mundial.
Por lo
tanto, esta importante Campaña Mundial por los 200 años del nacimiento de Karl
Marx desarrollada con base en la Guerra Popular, demuestra cómo se está
cumpliendo y comprobando la plena vigencia de los principios del comunismo y
programa definidos por el Manifiesto hace 170 años de su primera publicación.
"Los proletarios no tienen nada que perder en ella, además de sus cadenas.
¡Tiene, a cambio, un mundo a ganar! "(Capítulo IV).
Notas:
1. Partido
Comunista del Perú (PCP). Sobre la Construcción del Partido. Bandera Roja, nº
46, agosto de 1976.
2. Todas
las citas y referencias al texto del Manifiesto del Partido Comunista fueron
extraídas de la edición en español del Manifiesto del Partido Comunista,
Ediciones en Lenguas Extranjeras, Pekin, 1964, y traducidas por los autores de
este artículo. Esta edición está disponible en http://www.marx2mao.com.
3. Partido
Comunista del Perú (PCP), Poner en marcha el MRDP en función de culminar
brillantemente. 1987.
4.
Presidente Mao Tsetung. En Memoria de Norman Bethume. Ediciones del Pueblo,
Pekín, agosto de 1952.
tag:
Revolución Bolchevique