Abril del 2017
Durante
todo el proceso de campaña, elecciones, reconteo y la proclamación de la lista
ganadora, el escenario estuvo oscurecido por una densa nube de duda,
corrupción, fraude, y mentira.
Pero
también todo este proceso ha sido importante desde otro punto de vista. Quizá
más que en otras oportunidades el revisionismo electorero de los hoxistas (ex
MPD), y los dirigentes del reformismo pequeño burgués enquistado en el
movimiento indígena (Pachakutik, Conaie,) han desnudado de manera más palmaria,
su rastrero comportamiento entreguista y afable con el viejo Estado al
participar en el proceso electoral como lo han hecho desde sus inicios, pero no
solo eso, al hacer filas a favor del candidato Guillermo Lasso y convertirse en
los garroteros de la banca en las calles.
Izquierda: Lourdes Tibán, Pachakutik.
Por último,
que no hay que perder la objetividad en la confianza que se debe tener en el
proletariado y su rol como vanguardia de las masas explotadas y oprimidas. Es
lo importante, mientras tengamos a la clase y su partido al frente, la victoria
está garantizada, no importa el tipo de batalla y de escenario, la victoria es
un hecho.
¡LA LETRINA ELECTORAL Y LA PRESIDENCIA DE LENIN
MORENO!
¡LA LETRINA
ELECTORAL Y LA PRESIDENCIA DE LENIN MORENO!
A pesar de
que el pasado 2 de abril se realizó la segunda vuelta electoral para elegir al
presidente del Ecuador, recién el 18 del mismo mes se hizo el recuento de 3.865
de actas cuestionadas por la oposición, dando como resultado el triunfo del
oficialismo (Lenin Moreno) con el 51,16% contra el 48,84 de Guillermo Lasso
(votos válidos)
Lo hemos
sostenido ya, pocas veces se ha visto un proceso electoral tan complejo, lleno
de irregularidades y sobre todo de la más burda y sinvergüenza manipulación de
información por parte de las dos expresiones de la gran burguesía en contienda.
Pero esa
nube nunca estuvo estática, inmóvil, por el contrario, se mostró oscilante,
todo el tiempo se movió sobre el cielo de la burguesía burocrática, de la
burguesía compradora y desde luego, por encima de las negras cabezas del
revisionismo y del oportunismo de la izquierda rastrera del país. Nube que
diluviaba mierda que se lanzan unos y otros, cada quién arrogándose el triunfo
electoral y de por medio, las masas, las mayorías, instrumentalizadas por las
distintas fracciones de la gran burguesía, arrastradas a defender la pantomima
y paranoia electorera.
Pero
también hubo la salvedad, 2’ 178.505 de empadronados tomaron la correcta decisión de NO VOTAR, sin
desestimar los 671.171 electores que optaron por el voto nulo y los 697.744
votantes que sufragaron el blanco. Blancos y nulos, que sin ser la
manifestación correcta de frente a la gran mentira electoral de la vieja
democracia, suelen mostrarse como manifestaciones de rechazo al proceso. De
todas maneras la suma del ausentismo con blancos y nulos terminaros
representando el 27,7% del universo de
empadronados.
Pero a
pesar de toda la podredumbre vivida durante las elecciones, hay que manifestar
lo importante que ha sido todo este proceso para nuestro pueblo.
Es palmaria
la decisión de un importante segmento de las masas de no creer en los procesos
electivos y por lo tanto NO VOTAN. Esto es fundamental. Pero también lo es el
trabajo que los maoístas desplegamos al respecto, que desde distintas
estrategias logramos empujar a varios sectores en el seno del pueblo a
abstenerse de participar en el sufragio. Como ejemplo citamos los resultados en
una importante comunidad indígena-campesina de incidencia en su trabajo
político. En la primera vuelta electoral la parroquia tuvo el 22% de ausentismo, siendo llevada a un 31% en
la segunda vuelta, evidenciando la posibilidad de que con el trabajo consiente,
decidido y de clase, se puede elevar el nivel de conciencia de las masas.
Es decir,
para aquellos que dudan de las capacidades revolucionarias del proletariado y
su partido, NO VOTAR es una consigna que debe ser permanentemente esgrimida
ante el gran engaño al que son sometidas las masas, pero, que dicha consigna
debe estar ligada íntimamente a otros aspectos como son el trabajo sostenido
con las masas, la propaganda revolucionaria y sobre todo, desatar, aún con
hechos limitados por los actuales niveles de desarrollo orgánico, acciones que
busquen permanentemente impedir que las elecciones puedan llevarse a cabo.
Y es que
era habitual observar como dirigentes del ex MPD: Natacha Rojas, Lenin Hurtado,
o los oportunistas como Lourdes Tibán y otros compartían tribuna con los archi
retardatarios y reaccionarios como Lasso y Páez emitiendo sendas arengas a los
manifestantes por la defensa y “recuperación” de la “democracia y la libertad”.
Es decir, para la burguesía compradora y para el revisionismo, antes del
régimen corporativista y fascista de Correa en el país había “democracia” y
“libertad” y que es el momento de recuperarla en las calles. O, cómo miembros
del Partido Comunista cabezón, (Partido Comunista del Ecuador), PCE (Partido
Comunista Ecuatoriano), socialistas, dirigentes sindicales y campesinos
vendidos, comulgaban con el oficialismo en “defensa de la democracia y la
revolución ante la arremetida de la derecha en Latinoamérica”.
Izquierda: Lourdes Tibán, Pachakutik.
Izquierda: Partido Comunista Ecuatoriano. Imagen derecha, saludos del PCE (cabezón) a triunfo de Moreno
Vaya
estupidez; no solo en los propósitos, en los discursos de parte y parte, sino
en la naturaleza ideológica de los actores políticos.
En
definitiva, las lecciones que hemos sacado de este proceso son valiosas. Que
podemos mejorar y profundizar el trabajo con las masas para propiciar que éstas
NO VOTEN.
Que el
nivel de trabajo con conducción y lineamientos políticos correctos pueden, en
los hechos, generar las condiciones objetivas para debilitar la tramoya
electoral y sujetos del nivel de desarrollo en la construcción que los
instrumentos para la revolución de Nueva Democracia se puede, inclusive,
impedir que estas se desarrollen como el viejo Estado pretende.
Hoy no nos
queda sino fortalecer nuestra posición de clase en el seno del movimiento
campesino, popular y obrero del país en aras de seguir haciendo lo que hemos
venido trabajando durante todos estos años, preparar las condiciones para
desatar la guerra popular, brega que se fortalece del trabajo cotidiano en el
seno del pueblo, sin perder la perspectiva que nada habremos hecho sino
combatimos, sobre la marcha, al revisionismo.
Vamos a
combatir a este régimen corporativista, fascista, como un soporte más a la
preparación de la guerra popular en el país.