Traducimos importante acción de las masas populares brasileñas en defensa de uno de sus dirigentes.
“Más de 150 campesinos bloquearon la ruta BR-155, en el sur de Pará, en manifestación de repudio al intento de asesinato del dirigente campesino del Área Revolucionario Osmir Venuto en la mañana del 23 de octubre.
Según las denuncias, el dirigente estaba cerca de una represa, en las proximidades del Área Revolucionaria, cuando fue atacado cobardemente por la espalda por pistoleros que efectuaron dos disparos con armas de fuego. Después del ataque, la víctima fue encaminada al Hospital Municipal de Eldorado dos Carajás, donde recibió tratamiento y se puso bien.
La ruta que une la redención a Marabá quedó bloqueada por toda la mañana. Tomaron parte de la protesta las familias organizadas por la Liga de los Campesinos Pobres (LCP) y militantes del Movimiento Femenino Popular (MFP).
El Área Revolucionaria Osmir Venuto se ubica cerca de Pau D’Arco, lugar de la matanza ejecutada por agentes de la policía en colusión con pistoleros a mando de terratenientes, que asesinó a 10 campesinos el 24 de mayo. En esa misma región, el 7 de julio, el dirigente campesino de la LCP Rosenildo, de 44 años, también fue asesinado.
En la edición de AND publicada en septiembre de este año, ya resaltábamos las amenazas del latifundio contra los campesinos del Área Revolucionaria Osmir Venuto, organizado por LCP de Pará y Tocantins, que luchan desde hace años por las tierras de la hacienda Surubim, en Xinguara (PA).
En el marco de la cobarde tentativa de homicidio, en nota, el Centro Brasileño de Solidaridad a los Pueblos (Cebraspo) convoca: “Se hace urgente el pronunciamiento y acción de las entidades y organizaciones sobre la criminal persecución que sigue siendo realizada en Pau D’arco de los campesinos que, se resisten bravamente luchando por la tierra para vivir el trabajo.
Y concluye: “El Cebraspo se solidariza con los campesinos y su justa lucha por la tierra en Pará y exige providencias de los gobiernos estatales y federales sobre las amenazas y asesinatos cometidos contra los campesinos en Pau D’arco. Las muertes después de la brutal matanza es una prueba cabal de la impunidad y de la posición de los gobiernos ante lo ocurrido.”