Monday, August 2, 2021

INDIA: La lucha de los trabajadores de Reliance Energy (Palabras de Azadi desde la India)

lunes, 2 de agosto de 2021

INDIA: La lucha de los trabajadores de Reliance Energy (Palabras de Azadi desde la India)



Cuando se dice que todo es posible, definitivamente, es cierto porque transformar la actividad sindical en un acto terrorista ha sido uno de los milagros de los gobiernos de la India, del previo y del actual.

La historia de estos trabajadores de la compañía eléctrica Reliance es una historia que podría ser de ciencia ficción si no fuera porque es cierta, porque esta sucediendo y, aunque tras la muerte de Stan Swamy hay voces que emergen protestando contra la draconiana ley anti-terrorista del país, lo cierto es que esas voces permanecieron hasta ahora en silencio mientras centenares de inocentes eran encarcelados …ojalá que la muerte de Stan sirva para algo bueno, aunque una no puede por menos que ser reticente al respecto. Es muy fácil reclamar justicia a toro pasado.

Es la historia de unos trabajadores que lucharon y luchan contra la discriminación laboral.

Hace más de 15 años, que los trabajadores contratados de Mumbai empezaron la lucha por recibir un trato igual al de los trabajadores regulares y fueron de logro en logro, a pesar de las detenciones y los despidos. De repente, el Estado se valió de una ley pensada para ser utilizada contra los terroristas para encarcelarlos acusándolos de delitos de los que no había pruebas. Ellos son la prueba que mezclar churras con merinas es posible en la India

Cinco trabajadores contratados por Reliance Energy Ltd (ahora Reliance Infrastructure Ltd) del barrio de clase trabajadora del este de Bombay, Kamraj Nagar, en Ghatkopar, fueron detenidos acusados de ser maoístas y aunque ahora están en libertad bajo fianza, la cuestión es: ¿cómo ser sindicalista te convierte en acusado bajo la ley antiterrorista? ¿es por ser de Telangana? ¿es por ser dalit?

Sin prácticamente pruebas, la policía argumentóque los trabajadores tenían vínculos con los maoístas. Los trabajadores sostienen que fueron detenidos simplemente por activismo laboral, para servir de advertencia a otros.

Hace apenas dos semanas, el juez Chandrachud del Tribunal Supremos dijo públicamente que "El derecho penal, incluida la legislación antiterrorista, no debe utilizarse indebidamente para sofocar la disidencia o para acosar a los ciudadanos"

Es bien sabido que una vez que se presenta un caso UAPA, la fianza es difícil y la investigación lenta. En los cuatro años transcurridos hasta 2019, más de 5.105 personas fueron detenidas en virtud de la UAPA, con una tasa de condenas del 2,2%, según los datos presentados por el gobierno al Parlamento en febrero de 2021.(Lo de llevar los registros al día no es una prioridad para este gobierno pues el numero real de personas detenidas en virtud de la ley antiterrorista prácticamente es el doble)

Tras ser arrestados, la vida de sus familias se derrumbó. Los alquileres de sus casas no fueron renovados, las madres teniendo que buscar trabajos precarios, enviaron a sus hijos de vuelta en Telangana a escuelas públicas residenciales para que se hicieran cargo de ellos. La madre de uno de los detenidos murió del shock al enterarse de la detención de su hijo. La mujer de otro detenido sufrió un derrame cerebral y perdió sus facultades mentales.

Todo empezó a principios de 2018 cuando la policía arresto varios trabajadores de la compañía eléctrica (curiosamente todos del estado de Telangana donde el partido maoísta esta renaciendo)

Todos ellos fueron acusados en virtud de los artículos 13(1)(a), 13(1)(b), 16, 18(a), 18(b), 19, 20, 38, 39 y 40 de la UAPA (enmendada en 2004 y 2008), así como de los artículos 465, 468 y 471 del Código Penal indio de 1860 (IPC). Estos artículos se refieren a la complicidad en actividades ilegales y terroristas, al reclutamiento de otras personas para cometer actos terroristas, a la acogida de un terrorista conocido, a la pertenencia a una organización terrorista, a la recaudación de fondos para una organización prohibida y a la falsificación.

Susan Abraham (mujer de Vernon Gonsalves) es la abogada que, junto con sus colegas Sudeep Pasbola y Arif Siddiqui,ayudó a los trabajadores de Reliance Energy a obtener la libertad bajo fianza, dijo que estaban pagando el precio de encabezar una lucha por los derechos de los trabajadores contratados por la empresa.

“Que los trabajadores contratados puedan estar implicados en leyes de terror por su labor sindical es el aspecto más chocante de este caso", dijo Abraham.Los trabajadores pensaron lo mismo. Relacionaron el momento de sus detenciones con la adquisición de Reliance Energy por parte de Adani Transmission en diciembre de 2017. Fueron detenidos a los dos meses de la adquisición. Tras la adquisición, los trabajadores temporales pensaron que toda mejoría y que su lucha había fructificado pero sus mundos se volvieron del revés.

Las detenciones paralizaron la actividad sindical en Reliance Energy, ahora Adani Electricity Mumbai Limited. N Vasudevan, secretario general del Sindicato de Empleados de Electricidad de Mumbai (MEEU), dijo que los trabajadores tenían miedo porque tenían contrato, lo que significaba que podían ser despedidos sin previo aviso.

"Desde que se produjeron las detenciones, los responsables de recursos humanos no dejan de recordarles que la policía está investigando sobre ellos", dijo Vasudevan. "El ambiente no es adecuado para ninguna acción colectiva". Su detención fue anunciada como la detención de maoístas que habían elegido el cinturón industrial de Bombay para "propagar su ideología". La policía también dijo que se les encontró un "cartel de Bhima Koregaon".

Esto quiere decir y conociendo el gobierno que había en Maharashtra en 2018, que la campaña de detenciones en los que se ha llamado el caso de Bhima Koregaon, empezó con la detención de estos trabajadores. Curiosamente, entre las casi seis mil paginas del pliego de cargos contra ellos, Bhima Koregaon solo menciona por el hecho que algunos de ellos tuvieran carteles del evento.

Recordemos que el caso de Bhima Koregaon se refiere a los ataques de individuos con banderas azafrán (hindutvas) contra los dalits que se dirigían a Bhima Koregaon (cerca de Pune) el 1 de enero de 2018, para celebrar el 200º aniversario de la batalla de Bhima Koregaon, librada entre los británicos y los peshwas. Los británicos, ayudados por soldados mahar o dalit, derrotaron a los peshwas. Desde que el Dr. B R Ambedkar rindió homenaje por primera vez en 1927 al monumento de la victoria construido por los británicos, los dalits se reúnen allí el 1 de enero de cada año. Ese día murió un joven a causa de la violencia naranja

El primer informe de información (FIR) señaló a los líderes hindúes Sambhaji Bhide y Milind Ekbote como responsables de la violencia. Aunque es público, notorio y bien conocido, uno nunca fue detenido y el otro esta en libertad bajo fianza desde el día siguiente a su arresto.

Posteriormente al arresto de los trabajadores de la compañía eléctrica y a partir de junio de 2018,16 académicos, artistas, activistas y abogados fueron arrestados en el caso incluyendo a Stan Swamy que fue el último de ellos y que falleció a los 84 años el 5 de julio de 2021, a la espera de la fianza después de estar en prisión preventiva durante 9 meses. Recordemos que, de manera sorprendente, en enero de 2020, la Agencia Nacional de Investigación se hizo cargo del caso.

Mientras estaban bajo custodia policial, los trabajadores de Reliance Energy recuerdan que fueron interrogados sobre los tres aspectos relacionados con sus detenciones: su trabajo sindical, la violencia de Bhima-Koregaon y sus supuestos vínculos con los maoístas.

Fueron golpeados de tal manera tras su detención que sus visitas al hospital se volvieron rutinarias: "¿Quién es vuestro jefe? Las tácticas de vuestro sindicato demuestran que es un sindicato maoísta. Vosotros os dedicáis a actividades antinacionales. ¿Por qué utilizáis palabras y expresiones como 'Camarada', ‘Nil Salam’ y 'Lal Salaam'? Extorsionáis a los contratistas y se lo enviáis a los maoístas'' eran algunas de las preguntas que les fueron dirigidas una y otra vez.

Una de las razones por las que el juez les concedió la libertad bajo fianza es porque considero que entre el material aportado por la policía no solo no había pruebas de su conexión con los maoístas, sino que quedaba claro que eran sindicalistas. Las acusaciones contra ellos estaban basadas en la presunción de su conexión con el PCI-maoísta. Ellos mismos dijeron a la prensa que la lucha sindical jamás intereso a sus interrogadores obsesionados como estaban con su relación con el maoísmo. Por más que ellos insistieran, la policía les decía: “Olvidaros de eso, hablarnos de los maoístas.” A los trabajadores se les mostraron fotografías de Sudhir Dhawale, Arun Ferreira y Vernon Gonsalves, todos ellos detenidos más tarde en el caso Bhima-Koregaon / Elgar-Parishad.

En cuanto a la acusación de extorsionar a los contratistas y enviarlos a los maoístas, los trabajadores dijeron a la policía que todos los sindicatos de Reliance recaudaban oficialmente fondos de los contratistas que se utilizaban para los trabajadores.

De hecho, como señaló el auto del juez "Los contratistas y los trabajadores cuyas declaraciones se han recogido en el pliego de cargos no hablan de que se haya recaudado ninguna cantidad para pagara ninguna organización prohibida, sino que se afirma específicamente que se recogió como una donación por la que se obtuvo el recibo y que los contratistas aportaron alguna cantidad... para hacer frente a cualquier contingencia que tuvieran sus propios trabajadores". ¿Por qué fuisteis a Bhima Koregaon?, les preguntó la policía cuando la respuesta era obvia: "Somos dalits, por eso fuimos".

El nombre de uno de ellos, Shankarayya Gunde, figuraba en el panfleto publicado por los organizadores del Elgar Parishad, uno de los 15 que formaban parte del comité organizador. Los acusados reconocieron haber acudido a la celebración de la victoria dalit junto con otros 40 trabajadores también dalit. Tras rendir homenaje en el monumento a la guerra el 31 de diciembre, habían tratado de acceder al acto de Elgar Parishad celebrada en Pune esa misma tarde, pero el espacio estaba abarrotado y no pudieron accderer. Volvieron a Mumbai a primera hora de la mañana del 1 de enero. Salvo Gunde, que había sido despedido en 2007, el resto se presentó a trabajar el 1 de enero.

La policía les dijo que lo sabían todo sobre ellos incluso a qué hora llevaban sus mujeres a los hijos al colegio, cuando los recogían, donde trabajaban como empleadas del hogar…así que la pregunta que uno no puede por menos que hacerse es:

¿Por qué la policía vigilaba a los trabajadores de la electricidad? ¿Qué los hacía tan peligrosos para que la policía los vigilara? La respuesta está en el crecimiento del Sindicato de Empleados de la Electricidad de Bombay (MEEU) desde su formación en 2005. Vasudevan, secretario general del sindicato, recuerda la tarde en que los trabajadores de Reliance Energy acudieron a él. Le dijeron que estaban en huelga y que necesitaban su "orientación".

Le explicaron que un trabajador llamado Taslim Siddiqui se había electrocutado mientras trabajaba. La empresa había pagado a su esposa una indemnización de 25.000 rupias, (más o menos 400 euros) cantidad que enfureció a los trabajadores lo suficiente como para hacer huelga. La viuda, ignorante de sus derechos acepto, pero ante la negativa de la dirección a hacer algo mejor, los trabajadores se acercaron al sindicato para aprender que pasos debian seguir para evitar que tan humillante situación se repitiera pues apenas hacia un mes que dos trabajadores de Tata Power habían muerto y el ministro de trabajo de Maharashtra fijo su indemnización en 650.000 (más o menos diez mil euros). Vasudevan pensó que lo mejor sería que una delegación de sindicalistas y trabajadores se reuniera con Malik donde se enteraron de que la dirección de Reliance Energy estaba dispuesta no sólo a pagar 650.000 rupias como indemnización, sino también a dar un puesto de trabajo a la viuda de Siddiqui, a condición de que se retirara la huelga.

"La historia de este éxito se extendió por toda la plantilla, y los trabajadores volvieron a preguntarnos cómo seguir adelante. Les dije que tenían que afiliarse a un sindicato", recuerda Vasudevan. Los trabajadores no querían afiliarse a ninguno de los sindicatos oficiales de Reliance Energy pues no solo no se interesaban por los trabajadores, sino que los propios lideres sindicales afines a la compañía enviaban matones para atacarlos cuando intentaban plantear sus demandas a la dirección.

Así nació el Mumbai Electric Employees Union (MEEU), un sindicato único en su género que contaba con representantes de tres sindicatos diferentes: Vasudevan, del Comité de Solidaridad Sindical, como secretario general; K L Bajaj, del Centro de Sindicatos Indios, como presidente; A D Golandaz, del Congreso de Sindicatos de toda la India, como vicepresidente, y el abogado laboralista M M Abhyankar, como tesorero. Sin embargo, la principal fuerza del sindicato residía en sus trabajadores activos. Gracias al nuevo sindicato, los trabajadores contratados de Reliance Energy vieron cómo cambiaba su vida.

Para que os hagáis una idea: los trabajadores recorrían largas distancias hasta sus lugares de trabajo, pero a menudo se tenían que volver si no se les asignaba ninguna tarea ese día. Si el contratista se iba de vacaciones o se ausentaba, sus salarios quedaban retenidos hasta su regreso. Si eran los trabajadores los que regresaban a su villa natal, se les penalizaba sin trabajar por varios días.

Estos trabajadores contratados cavaban zanjas y tendían cables con zapatillas normales, y sus pies a menudo se veían afectados por permanecer horas en agua sucia. Cuando llovía, utilizaban láminas de plástico para cubrirse. Si alguno de ellos moría, la empresa pagaba una mísera suma, que en ocasiones llegaba a las 5.000 rupias, y el contratista enviaba a la familia del trabajador fallecido al pueblo.

La formación del MEEU cambió todo eso.

Consiguieron que se les pagara en un día fijo del mes en lugar de en cualquier momento; los sueldos se ingresaron directamente en sus cuentas bancarias; obtuvieron beneficios del fondo de previsión; trabajo regular en lugar de trabajo dependiente de los caprichos de la dirección; vacaciones pagadas y días festivos nacionales pagados; se les proporcionó equipo de seguridad básico, como chubasqueros y zapatos de goma para evitar electrocuciones, que se producían con regularidad cuando los trabajadores cavaban zanjas o tendían cables; la familia de un trabajador fallecido en acto de servicio iba a recibir una indemnización de 810.000 rupias; y en 2017, obtuvieron tarjetas sanitarias en el marco del régimen de seguro estatal de los empleados.

El sindicato también logró un éxito histórico en 2007, cuando, descontentos con el acuerdo alcanzado por el sindicato oficial, el MEEU hizo huelga. Se les unieron todos los trabajadores contratados, incluidos los del sindicato oficial, y juntos consiguieron que la dirección aceptara el acuerdo que buscaban.

En 2010, 1.200 trabajadores contratados obtuvieron puestos fijos, no por recomendación de los dirigentes sindicales, como ocurría en el pasado, sino por antigüedad. Estos éxitos hicieron que unos 1.300 de los 4.000 trabajadores contratados se afiliaran al MEEU. "Todo esto ha sucedido gracias al compromiso de unos 100 trabajadores activos", dijo Vasudevan. Los cinco que fueron detenidos en virtud de la UAPA estaban entre los más activos.

"Para cada reivindicación, tuvieron que hacer huelga porque, al principio, la empresa no estaba dispuesta a escuchar", dijo Vasudevan. "Más tarde, cuando vieron lo completas que eran las huelgas y cómo afectaban al negocio de Reliance, que se estaba expandiendo con el auge de la construcción en la ciudad, la empresa empezó a llamarnos para negociar, de forma no oficial, porque ya existía un sindicato reconocido".

"Como siempre llevábamos a los trabajadores con nosotros cuando íbamos a negociar, éstos aprendieron a negociar con la dirección por su cuenta, convirtiéndose en el único grupo de trabajadores de Reliance que no dependía de personas ajenas a la empresa", afirma Vasudevan.

El compromiso de estos trabajadores tuvo un coste. En 2007, Shankarayya Gunde fue uno de los once trabajadores despedidos por su actividad sindical. Los once fueron acusados en virtud de la Ley de Servicios Esenciales de Maharashtra de 2005, por haber interrumpido supuestamente los servicios esenciales.

Sin pruebas que respalden las acusaciones contra los trabajadores, el caso fue finalmente retirado. El despido no fue revocado; el caso de Gunde está pendiente en el tribunal laboral.

Dias antes de su detención, en enero de 2018, cinco fueron suspendidos. El mes anterior, diciembre de 2017, un trabajador se desmayó de camino a casa después del trabajo y murió a la mañana siguiente. Los trabajadores alegaron que no recibió el tratamiento adecuado por carecer de tarjeta ESI. Al considerar a la empresa responsable de su muerte, hicieron una huelga para exigir una indemnización.

La huelga duró unas horas hasta que la empresa accedió a pagar la indemnización, pero los trabajadores fueron marcados como ausentes, aunque habían vuelto al trabajo. Cuando el MEEU protestó, fueron suspendidos.Estos trabajadores no se arrepintieron de ser activos en el sindicato, aunque hubieran pagado tan alto precio. Se acercaron a Vasu buscando ayuda y orientación, pero tenían muy claro que tenían derechos y necesitaban orientación para la lucha que emprendían por su dignidad laboral.

Una de las primeras peticiones que los cinco ex trabajadores de Reliance Energy hicieron a Vasudevan fue que les permitiera recibir ejemplares de la revista telugu Veekshanam en su oficina sindical. Eran ávidos lectores de la revista, pero no tenían un lugar donde recibirla al por mayor. Vasudevan aceptó."Es muy raro conseguir que la gente, sobre todo los trabajadores, lean", dijo Vasudevan. "Su concienciación, su afán por leerlo todo, los llevó a interesarse por causas más allá de las suyas". Al ser originarios de Telangana, también se integraron en el movimiento a favor del estado de Telangana. Otros trabajadores no tienen ni idea de lo que pasa en el mundo; estos trabajadores eran completamente diferentes".

El material que la policía encontró en sus casas reflejaba sus intereses: banderas rojas y amarillas, ejemplares de "Veekshanam" y un cartel del 8 de marzo, Día Internacional de la Mujer, que, según Vanguri, irritó a la policía.

Su conciencia política les hizo la vida más difícil en la cárcel. Se negaron a sobornar a las autoridades carcelarias y a los policías para obtener comodidades básicas, como que les permitieran sentarse cómodamente y comer la comida que les traían sus familias al juzgado, o que les dieran espacio suficiente para dormir en los barracones. También se negaron a firmar los papeles en blanco que la policía quería que firmaran en la cárcel como suelen hacer.

Como presos de la UAPA, también estaban sometidos a más penurias que los demás. Después de los primeros meses, se impidió que sus esposas se reunieran con ellos en la cárcel, hasta que obtuvieron una tarjeta de identificación especial verificada por una comisaría de policía situada cerca de su casa. Este proceso duró unos cuatro meses. Cuando los llevaban al juzgado, lo hacían bajo fuertes medidas de seguridad, a veces esposados. A menudo, la policía no permitía a sus familias hablar con ellos en el tribunal.

Hoy en día, los cinco hombres están sufriendo, no pueden abandonar Maharashtra lo que les impide reunirse con sus familias pues deben presentarse semanalmente en la comisaria, dependen de trabajos esporádicos para ganarse la vida, pero su ánimo sigue intacto. "En este país, si quieres luchar por tus derechos y los de los demás, tienes que sufrir", dijo Gunde. "Esa es la norma".

"Si estamos fuera es debido a nuestros compañeros".

Ahora, los cinco trabajadores del Sindicato de Empleados Eléctricos de Mumbai están en libertad bajo fianza. El Estado, que detuvo a estos trabajadores en virtud de la UAPA tras el incidente de Bhima Koregaon, no ha podido probar ninguno de sus cargos. Estos trabajadores eran culpables de una sola cosa: organizar a los trabajadores contratados contra su poderoso propietario Reliance. Como no se les pudo acusar de estas actividades como traición, el Estado sigue encontrando cargos endebles para mantener a cientos de activistas y trabajadores en la cárcel bajo otros pretextos.

Lal Salam

Enlaces:

https://www.groundxero.in/2021/06/21/bail-after-3-years-for-the-incarcerated-mumbai-electric-employees-union-workers/

https://scroll.in/article/903827/maoist-plot-in-mumbai-12-identical-statements-put-police-claims-under-doubt

https://article-14.com/post/how-5-reliance-workers-fighting-for-a-better-deal-found-themselves-in-jail-on-terrorism-charges-61020ec49f652