¡Proletarios de todos los países, uníos!
NOTA 4 SOBRE LOS ÚLTIMOS ACONTECIMIENTOS EN EL PERÚ
Un régimen como el actual establecido por el llamado “autogolpe de Fujimori” (abril de 1992), el chumbeque ensartado en las bayonetas de las Fuerzas Armadas genocidas, que se ha mantenido vigente a través de varios gobiernos que se han sucedido tras la caída de Fujimori el 2000, entró en crisis final el 2016, desde ese año se han sucedido 6 presidentes como cabeza de ese mismo régimen y del viejo Estado peruano. Estado terrateniente-burocrático al servicio del imperialismo principalmente yanqui. Todos los ex-presidentes que se han sucedido a la cabeza del régimen fascista, genocida y vendepatria, hasta el pasado reciente de Castillo, están en prisión, por sus robos y otros delitos.
El régimen ,está totalmente desprestigiado, por haber servido a profundizar más la crisis general de la vieja sociedad peruana y del Estado que la representa y defiende a sangre y fuego, aumentando los padecimientos de las masas, la desocupación, el hambre y la miseria y la represión. El gobierno reaccionario de Castillo, ni siquiera pudo comprar la urea (fertilizante) para la agricultura por ineficacia extrema y disputa por las coimas para otorgar la compra estatal.
Por todo lo dicho anteriormente, el régimen y las instituciones del viejo Estado como el Ejecutivo, Parlamento, Poder, Judicial, Ministerio Público, la columna vertebral del Estado las Fuerzas Armadas y represivas y su burocracia están enormemente desprestigadas, por sus robos, su ineficacia y su insensibilidad ante los padecimientos sin fin de las masas. Un régimen como éste, impopular, ya no es útil para la dominación yanqui sobre el país. Es por esto que como hemos visto en la Nota 3, del día de ayer, el imperialismo trama su caída lo que de una u otra manera tiene que ver con el desencadenamiento de los acontecimientos en marcha. La genocida Dina Boluarte, la nueva presidente del viejo Estado, nueva cabeza oportunista del régimen fascista, genocida y vendepatria, también está en la picota.
El imperialismo yanqui utiliza a los gobernantes mientras le conviene, una vez que estos han llegado a tal grado de descrédito, se desembaraza de ellos simplemente. Como hemos visto es el mismo lacayo del imperialismo yanqui quien pidió a gritos desesperados la intervención imperialista a través de la OEA.
Todo lo que se está dando en el país son las condiciones que posibilitan desarrollar la revolución, dar un salto en el proceso de reorganización general del PCP, para dar un nuevo gran impulso a la incorporación de las masas a la guerra popular. Eso es lo más importante de los acontecimientos actuales en el país. Esa es la necesidad que está gritando como un niño al momento de nacer.
Vivimos el desarrollo de la situación revolucionaria. Lenin magistralmente la caracterizó mediante tres notas: „1) Imposibilidad para las clases dominantes de conservar su dominación sin producirse cambio alguno; crisis en las `alturas`, crisis en la política de la clase dominante, que abre una grieta por la que se filtran el descontento y la indignación de las clases oprimidas. Para que la revolución se produzca no es bastante que ‚los de abajo no quiera` sino que requiere además que ‚los de arriba no puedan‘ vivir como antes. 2) Una agudización superior a lo ordinario de las necesidades y calamidades de las clases oprimidas. 3) Una elevación considerable, en virtud a las causas anteriores, de la actividad de las masas, que en época de paz`se dejan expoliar tranquilamente; pero que en tiempos turbulentos son incorporadas, tanto por todo el ambiente de la crisis como por las propias ‚alturas`, a una acción histórica independiente“ (El “izquierdismo” enfermedad infantil del comunismo)
Lo anterior corresponde a las condiciones objetivas o situación revolucionaria. Pero junto ellas, hay necesidad de las condiciones subjetivas, esto es la vanguardia organizada, el PCP. Porque la revolución de nueva democracia y su paso ininterrumpido e inmediato al socialismo solo es posible mediante la guerra popular.
El Presidente Gonzalo, solemnemente, en el I Congreso del Partido, señalo:
“Pero una guerra
popular, una guerra revolucionaria, una guerra justa, como es la nuestra, solo
y únicamente la puede dirigir un Partido Comunista y nadie más que un Partido
Comunista, a través de sus dirigentes, de sus cuadros, de su militancia;
dirigirla, no hacerla, porque la hacen las masas, bien lo sabemos nosotros,
porque si bien claros estamos en que el Partido es la luz que rasga a las
sombras, la masa es la fuerza la savia que todo transforma y cambia generando
los albores para siempre, bien lo sabemos nosotros. Pero eso nos lleva a
comprender cada vez más, viendo nuestra propia historia de esta nación que
estamos cuajando nosotros mismos, vemos cómo esa masa huérfana de Partido
deambula a tientas, incesante en combates, eso sí, vertiendo su sangre porque
nunca jamás ha dejado de hacerlo y lo hará , la masa es la masa; pero
sabemos que sin un Partido toda esa lucha de la masa, del pueblo y del glorioso
proletariado internacional del cual somos parte y el proletariado peruano lo es
también, sin que Partido Comunista, sin ese eje, sin ese factor que dinamiza,
que dirige, que guía, nada será hecho, todo será deleznable, castillo de
naipes, se derrumbará, pues si la masa tiene la fuerza nosotros tenemos el
rumbo, por eso el Partido es el eje. Engels nos decía: “solo desde la posición
del proletariado se puede entender el mundo contemporáneo” y, así es, solo
desde la posición del proletariado y solo a través del Partido se puede
entender la historia nueva de un pueblo, porque es ese Partido quien arma al
pueblo, quien arma su mente y genera la potente armazón de su inagotable brazo
combatiente, de eso estamos convencidos”.
Moviminto Popular Perú
17 de diciembre de 2022