29. November 2022
¡Proletarios
de todos los países, uníos!
CHINA: LA LUCHA DE LAS MASAS DA
EL SALTO DEL NIVEL REGIONAL Y LOCAL A LA PROTESTA MASIVA A NIVEL NACIONAL
“(Si ocurre la restauración capitalista)
… la dictadura del proletariado se transformará en la dictadura de la
burguesía, una dictadura reaccionaria y fascista”. (Presidente Mao, Discurso de la
Conferencia de los Siete Mil Cuadros)
De las movilizaciones de las masas en
las provincias y regiones, creciente durante el presente siglo, contra los
funcionarios de esos gobiernos y los dirigentes y comités de ese nivel del partido
revisionista, “lucha contra funcionarios”, se desarrolla la lucha hasta el
nivel nacional apuntando contra el gobierno Xi ji Ping y el Estado de
dictadura de la burguesía y el régimen fascista. China es un país
socialimperialista con un gobierno fascista, que expresa cada vez una mayor
descomposición en la marcha hacia la bancarrota definitiva del revisionismo.
Corroído por sus contradicciones internas dese finales del 2020 aplica una
redoblada política de mayor supresión de derechos, libertades y beneficios
contra el proletariado y el pueblo, mientras aumenta la colusión y pugna contra
la otra fracción de la burguesía imperialista china, redoblada política de
represión a la organización y protestas de las masas. Mientras, cada vez más,
centra en el armamentismo para potenciar su poderío militar en busca del sueno
revisionista de llegar a ser una superpotencia, lo que incrementa su colusión y
pugna con la superpotencia imperialista yanqui y las demás potencias.
Como en los demás países imperialistas
que han usado las “medidas contra el Corona” para reaccionarizar más el Estado
de dictadura de la burguesía, avanzando en la supresión de derechos y
libertades y prohibir las movilizaciones de las masas; recortando o prohibiendo
temporalmente la libertad de tránsito y el derecho a la demostración; todo lo
anterior, bajo la cobertura de la lucha contra la pandemia del Covit-19. En la
China socialimperialista se aplica la tan publicitada política del “Covid 0”,
como un gran éxito del régimen a diferencia de los “países occidentales” (lo
otros imperialistas), donde la endemia causó un gran numero de muertos. Pero,
ahora todo esto le explotó en la cara, no solo porque muestra el verdadero
carácter y objetivo de sus medidas, sino también en que esta política de salud
del régimen ha fracasado, lo que esta demostrado por las bajas tasas de
vacunación y la poca efectividad de las vacunas para controlar el mal y su
propagación. Lo anterior, tiene algo de positivo, porque sirve para aplastar la
campana del revisionismo sobre “el fabuloso éxito de China en el control de la
pandemía”, lo que es muy importante en América Latina.
Todo lo anterior, se da sobre la base de
grandes dificultades económicas, como parte de la crisis general y última del
imperialismo, con crisis de sobreproducción recurrentes, con ciclos cada vez
mas cortos hasta el presente que en China se desenvuelve desde la crisis
mundial de 2007-2009, apareciendo como un cada vez mayor decrecimiento del
crecimiento, de los digito en que la economía creció a menos de 10 hasta 6 o 7
en anos recientes hasta el actual que sigue a la baja (*), con un 4,9% para
2022, muy por debajo de las necesidades de crecimiento de la economía china,
para ponerse al nivel de los países imperialistas de mayor desarrollo
capitalista, siempre en busca de hacer realidad el sueno de los
socialimperialistas chinos de convertirse en una superpotencia imperialista y
disputar la hegemonía mundial. Esto determina una mayor colusión y pugna con la
superpotencia imperialista yanqui, como se puede ver en la disputa en torno a
Taiwan, en la reciente reunión del llamado “G20”, donde ante la presión yanqui
toma distancia de imperialismo ruso y Putin, en cuanto a la guerra de agresión
contra Ucrania y luego sus abrazos y gestos de Xi con Biden.
Lucha contra la política del “cero
Covit” es lucha por derechos de asociación, de manifestación y de huelga, que
para su efectividad dependen de la libertad de domicilio y de desplazamiento,
estas son precondiciones para la lucha proletaria por la libertad de trabajo y
por salarios, jornada y condiciones de trabajo. Todo lo anterior, indispensable
para la organización independiente del proletariado por sus verdaderos
intereses presentes e históricos, la lucha por reconstituir el Partido
Comunista y la contrarrestauración contra la restauración capitalista mediante
la guerra popular como lo estableció el Presidente Mao expresamente para el
caso de China (Volver a las montanas Chinkang). La lucha por la dictadura del
proletariado y el socialismo.
El carácter político de la lucha
presente del proletariado y las masas en China muestra el desarrollo de la
contradicción burguesía-proletariado, que se da como contradicción masas
populares contra gobierno revisionista y su régimen fascista; también muestra
el desarrollo de la contradicción inter-burguesa en China, entre la facción
burocrática encabezada por Xi y el partido revisionista y la facción
demo-burguesa, que esta por desplazar a la facción burguesa dominante. Aquí se
da, también, esa convergencia real temporal y relativa entre dos fuerzas que
enemigos irreconciliables porque las dificultades que cree la facción
demo-burguesa a la facción burocrática le favorece al proletariado y, por el
otro lado, las luchas del proletariado y las masas favorecen a su enemigo, la
otra facción en su disputa reaccionaria.
En síntesis mayor descomposición del
socialimperialismo chino en camino a su bancarrota definitiva. Y, lo que es
principal, necesidad de la reconstitución del Partido Comunista de China.
Demos una repasada a los hechos en la cual nos basamos:
China: las
violentas protestas en la mayor fábrica de iPhone del mundo
El 22 de los corrientes, se conoció por
información de la prensa internacional de las violentas protestas en la mayor
fábrica de iPhone del mundo en la
ciudad china de Zhengzhou, Una serie de protestas violentas se reportaron en la
mayor fábrica de iPhone del mundo, 123 según imágenes que han circulado en
internet.
Cientos de empleados marcharon y se
enfrentaron contra personal de seguridad en trajes de protección personal y por
policías antidisturbios. Los
manifestantes fueron golpeados por la policía. Los videos también
captaron los enfrentamientos.
Tras hacerse públicas esas imágenes, la
fabricante Foxconn dijo que trabajaría con el personal y el gobierno local para
evitar más violencia.
En un comunicado, la empresa dijo que
algunos empleados tenían dudas respecto al salario pero que la firma cumpliría con los pagos establecidos en
los contratos.
La compañía también calificó de “falsos”
unos rumores sobre que a los nuevos empleados recién reclutados les pidieron
que compartieran dormitorios con trabajadores que habían dado positivo por
covid.
Foxconn
afirmó que los cuartos fueron desinfectados e inspeccionados por autoridades
locales antes de que el personal nuevo los ocupara.
El mes pasado, el aumento de casos de covid forzó un confinamiento
en la fábrica, del cual algunos empleados huyeron y regresaron a sus
casas.
La compañía entonces reclutó nuevos
trabajadores con la promesa de entregarles bonificaciones generosas.
Piden
por sus derechos
Los trabajadores gritaban: “¡Defiendan
nuestros derechos!”
Otros fueron vistos rompiendo cámaras de vigilancia y ventanas con palos.
“Cambiaron el contrato para que no
pudiéramos obtener el subsidio que prometieron. Nos meten en cuarentena pero no
nos proveen comida”, dijo un empleado de Foxconn durante la transmisión en
vivo.
“Si no atienden nuestras necesidades,
continuaremos luchando”.
Según
informes, hubo heridos por la paliza propinada por la policía.
Los informes se refieren a lo ocurrido
en la planta de Zhengzhou, donde los trabajadores protestaban porque Foxconn
había “cambiado el contrato que habían prometido”.
“Esos trabajadores que están protestando
quieren recibir el subsidio y regresar a casa”, expresó un miembro del
personal.
Las
autoridades
El miércoles en la mañana hubo un gran despliegue de la policía en la planta.
Otros videos trasmitidos en vivo mostraron una multitud de policías armados en
el lugar. El motivo concreto de las protestas fue porque están mezclando a los
trabajadores nuevos con los antiguos que habían dado positivo [a covid]
A finales de octubre, muchos
trabajadores escaparon del confinamiento en la planta de Zhengzhou para
regresar a sus casas en autobuses y camiones.
Foxconn, una firma taiwanesa, es el principal subcontratista de Apple y
en su planta en Zhengzhou ensambla más iPhones que en cualquier otro lugar del
mundo.
A finales de octubre, numerosos
trabajadores huyeron de la planta en medio de un aumento de casos de covid y
acusaciones de maltrato de personal.
La huida fue captada en las redes
sociales a medida que iban montados en
camiones hacia sus casas.
Desde entonces, la firma ha impuesto la
llamada operación bucle cerrado en la planta, lo que la mantiene aislada del
resto de la ciudad de Zhengzhou debido a los brotes de covid que allí han
ocurrido.
Posteriormente, esto es desde el dia de
ayer se comenzo a conocer de nuevas protestas en diversas partes de China.
Barricadas y
detenciones en China tras las inusuales protestas contra Xi Jinping y su
gobierno por el manejo de la pandemia
La
policía en China ha estado deteniendo a un número de personas a causa de las
protestas contra el gobierno que se han extendido por varias de sus grandes
ciudades. Las manifestaciones presentan un desafío sin precedentes contra el
presidente Xi Jinping.
Las protestas que se iniciaron contra
las restricciones por la covid en China a raíz de un incendio que mató a 10
personas en un bloque de apartamentos en Urumqi, capital de la región autónoma
uigur de Xinjiang, se extendieron este domingo a la capital, Pekín, y en
Shanghái.
Cientos de personas se manifestaron
sosteniendo hojas de papel en blanco en una protesta silenciosa, mientras que
otros pidieron públicamente la renuncia del líder chino Xi Jinping.
Pero en la mañana del lunes las calles
de Shanghái parecen haberse quedado en silencio, con imágenes que muestran la
actividad normal del tráfico.
No obstante, la policía en Shanghái detuvo a varias personas en
el lugar, donde el único recordatorio de las manifestaciones el fin de
semana parecen ser las filas de barricadas azules.
Con
frecuencia un objeto simboliza todo un movimiento de protesta. En China, ese
objeto es un humilde trozo de papel en blanco.
Al anochecer del domingo en Shanghái,
algunos de los que se reunieron en una vigilia para recordar a las víctimas de
un incendio ocurrido el jueves en un bloque de apartamentos (en Urumqi, capital
de la región autónoma uigur de Xinjiang) que desencadenó las protestas contra
las restricciones por la covid en China, lo
hicieron portando hojas de papel en blanco.
De manera similar, en la capital, Pekín,
los manifestantes acudieron armados con trozos de papel a una manifestación en
la prestigiosa Universidad Tsinghua de Pekín, en la que en su día estudió el
presidente Xi Jinping.
Mientras, en otro llamativo video se
pudo ver a una joven caminando por las calles de Wuzhen, ciudad de la provincia
oriental de Zhejiang, con cadenas en las muñecas y cinta adhesiva en la boca
agarrando con sus manos una hoja de papel en blanco impoluta.
Esta
tendencia tiene sus raíces en las manifestaciones de Hong Kong de 2020, en las
que los habitantes sostenían papeles en blanco para protestar contra las nuevas
leyes draconianas de seguridad nacional de la ciudad.
Para analizar los hechos, que hemos extraído de la prensa burguesa y sacar
nuestra propia síntesis, que encabeza el presente artículo, entre otros, hemos
utilizado el importante documento: Conmemorar el Centenario de la Fundación del
Partido Comunista de China del Grupo Comunista (Maoísta), China 1 Julio de
2021. Del documento destacamos:
“El presidente Mao señaló que “(si
ocurre la restauración capitalista) … la dictadura del proletariado se
transformará en la dictadura de la burguesía, una dictadura reaccionaria y
fascista”. (Discurso de la Conferencia de los Siete Mil Cuadros)
En la nueva Constitución de 1982, se
eliminó el derecho de las masas a hacer huelgas, realizar grandes debates y
hacer carteles de gran carácter, reafirmando la dictadura fascista en el plano
jurídico.
La contradicción entre el proletariado y
la burguesía se intensificó a una escala sin precedentes con las reformas. Las
condiciones de trabajo para cientos de millones de trabajadores campesinos y
proletarios urbanos pobres son muy viles, la retención de salarios, la gestión
cruel y los accidentes laborales son las normas para los trabajadores, ya que
las protecciones básicas bajo el sistema socialista fueron abolidas por
completo hace mucho tiempo. Cuando los trabajadores luchan contra la
explotación, a menudo son reprimidos por la policía. La sindicalización sigue
siendo completamente ilegal hasta el día de hoy, mientras que los sindicatos
oficiales formados por un puñado de burócratas casi nunca tienen ningún efecto.
Con el inicio del nuevo siglo, los
trabajadores chinos nunca han detenido su lucha reivindicativa. Según datos
oficiales, los “incidentes masivos” en China aumentan cada año, y “en
incidentes masivos con más de 100 participantes, la causa principal es el
conflicto entre el trabajo y el capital”. Las luchas de los trabajadores
asumieron muchas formas, como huelgas, marchas y sentadas, siendo la lucha más
intensa el “Incidente del Grupo de Hierro de Tonghua”, donde los trabajadores
enojados golpearon hasta matar a un gerente reaccionario. Aparte de eso, los
trabajadores de algunas fábricas plantearon la demanda para formar sindicatos.
Debido al carácter reaccionario del régimen reaccionario chino, estas luchas se
libran casi todas bajo la amenaza de la represión policial.
Con la desaceleración del crecimiento
económico, las contradicciones sociales, que se suavizaron levemente, volvieron
a intensificarse. La fuerza principal de la lucha reivindicativa se expandió
desde los proletarios industriales urbanos y los campesinos pobres hasta los
trabajadores en todos los campos de la sociedad. En 2018, los operadores de
grúas torre lanzaron una huelga unida a nivel nacional, aumentando la demanda
para aumentar los salarios. Los trabajadores del sector de servicios: empleados
de supermercados, taxistas y repartidores, todos libraron luchas en huelga
contra la explotación capitalista. En Internet, los programadores de
computadoras levantaron el llamado contra “996” (trabajando 12 horas al día, 6
días a la semana), obteniendo un apoyo generalizado. La lucha del proletariado
contra la burguesía se intensifica cada vez más, el viejo método de explotación
que se basaba principalmente en la obtención de la plusvalía absoluta no puede
continuar.
Los estratos medios, incluso con la
posición de pequeña burguesía, se polarizan constantemente. El estatus de la
intelectualidad sigue disminuyendo, los pequeños empresarios enfrentan la
amenaza de la quiebra, los campesinos medios enfrentan crisis agrícolas, entre
otras, rebajan una cantidad considerable de ellas a la posición del
proletariado.
En Hong Kong, estallaron disturbios
contra las leyes reaccionarias y exigiendo la ampliación de la democracia. Esta
lucha fue liderada por liberales reaccionarios, pero expuso objetivamente la
severa contradicción de clases en la zona, que es producto de la colaboración
con la gran burguesía y desconociendo el interés del amplio pueblo trabajador
desde la cesión de Hong Kong en 1998.
Internacionalmente, la gran burguesía en
China se enfrenta a una nueva crisis. China lleva a cabo políticas para
facilitar la exportación de capital como “Un cinturón, una ruta”, estacionando
fuerzas armadas en África. Estos actos intensificaron la contradicción entre el
socialimperialismo chino y las naciones oprimidas a nivel internacional, así
como la contradicción entre China y otras potencias imperialistas. La masa de
muchos países oprimidos quemó la bandera china y les dijo a los capitalistas
chinos que salieran. Estados Unidos lanzó una guerra comercial contra China
hace dos años, golpeando su exportación y obligándola a ceder en muchos
aspectos. Este año, las potencias imperialistas de América del Norte y Europa
Occidental lanzaron una sanción conjunta contra China con el pretexto de los
“derechos humanos”, entre otros. La contradicción de la competencia por el
dominio global entre China y otras potencias imperialistas es irreconciliable.
El deseo de China de volver a repartir el mundo entró en conflicto con las
antiguas potencias imperialistas. Sobre la base de estas contradicciones, se
está gestando una nueva guerra mundial o guerra fría. Sin embargo, China hoy en
día no es “uno de los dos polos” como algunas personas piensan. Es solo uno
entre los países del Segundo Mundo. Estados Unidos sigue siendo la única
superpotencia hegemónica y el enemigo número uno de los pueblos del mundo.
Más importante aún, las fuerzas
subjetivas para la revolución en China tuvieron algunos desarrollos en los
últimos años. En las décadas de 1990 y 2000, los “izquierdistas” que hicieron
llamamientos “revolucionarios” con la bandera del presidente Mao eran en su
mayoría reformistas indisolublemente vinculados al régimen revisionista. Aunque
participaron de forma limitada en la lucha reivindicativa de las masas obreras
en ese momento, no pudieron liderar verdaderamente la revolución. Algunos
grupos relativamente avanzados fueron rápidamente reprimidos por el estado
fascista después de emerger. Casi nadie fue capaz de comprender verdaderamente
el maoísmo, algunos no pudieron distinguir entre la “restauración del
capitalismo” y la “privatización” y vieron la década de 1990 como el período de
la restauración del capitalismo en China. Algunos fueron severamente
influenciados por el nacionalismo y produjeron una comprensión incorrecta del carácter
de la sociedad china, pensando que China se ha convertido en una “semicolonia”
y que se necesita una revolución nacional antes de una revolución socialista.
También se vulgarizó la comprensión de la Gran Revolución Cultural Proletaria,
la lucha contra la burguesía dentro del Partido y para limitar los derechos de
la burguesía se malinterpretó como la lucha de palacio de unos pocos individuos
de alto nivel. Con el desarrollo de la situación, muchos “izquierdistas” se
convirtieron en derechistas.
A pesar de sufrir contratiempos tan
severos, la difusión de ideas avanzadas es inevitable. Cada vez más personas se
dieron cuenta de la naturaleza fascista del régimen que afirmaba ser
“socialista con características chinas”. Como señaló el presidente Mao, “si se
lleva a cabo un golpe anticomunista de derecha en China, estoy seguro de que no
tendrán paz, posiblemente no durarán mucho, porque todos los revolucionarios
que representan los intereses de más del noventa por ciento la gente no lo
tolerará. En ese momento, los derechistas pueden tener la ventaja usando mis
palabras, pero los izquierdistas definitivamente usarán mis otras palabras para
organizarse y derribar a los derechistas “. El principal problema en el período
actual es que las personas dispuestas a aceptar el comunismo aún no conocen el
maoísmo, muchos elementos avanzados no son capaces de diferenciar completamente
el maoísmo del revisionismo. Se requiere un trabajo prolongado de los
revolucionarios”.
De la prensa burguesa hemos utilizado
para la parte del crecimiento en decrecimiento de la economía de China, las
siguientes fuentes:
El Economista – 25/09/2022
China lastra el crecimiento del resto de
las economías en desarrollo de Asia. Así lo prevé el Banco Asiático de
Desarrollo (ADB), que ha recortado las expectativas de crecimiento pese a la
muestra de signos de recuperación debido a la política de cero Covid china.
Es la primera vez en treinta años que el
resto de países en desarrollo crece más que China, según el informe de ADB. Hay
que retrotraerse a 1990 para
ver una situación así, en ese año el resto de países crecían en un 6,9%
mientras que la economía china caía un 3,9%. En la actualidad la distancia es
menor: se espera que China crezca un 3,3% mientras que el resto lo haga un 5,3%, según apunta el informe….
Aunque cabe matizar que ambas cifras
suponen nuevas rebajas de las expectativas. En el caso chino en julio las
perspectivas de crecimiento del 5 al
4%. En esta ocasión atribuyeron el declive a la política anti covid,
los problemas del sector inmobiliario y a la ralentización económica ante el
debilitamiento de la demanda exterior que sufre el país. De cara a 2023, ADB ha
reducido el crecimiento del gigante asiático del 4,8 % que le daba en el mes de
julio, al 4,5% actual. Esto se debe al “deterioro de la demanda externa que
continúa frenando la inversión en manufactura”, apuntan.
Panorama
general
En el cómputo general, ADB espera que en
2022 el crecimiento de los países asiáticos este en un 4,3% y en 2023 se situé
en un 4,9%. Una
perspectiva que al igual que en el caso chino se ha reducido respecto a los
pronósticos del mes de julio, donde se esperaba un 4,6% y un 5,2%
respectivamente, según el informe publicado este por ADB. En términos
generales, los países asiáticos en desarrollo muestran signos de recuperación
continua, debido especialmente al turismo. Pero la situación global está
frenando este crecimiento.
BBC News – 5 claves para entender por qué la economía
de China está en problemas
La economía de
China se está desacelerando mientras intenta adaptarse a una estrategia
castigadora de “cero covid” y al debilitamiento de la demanda mundial.
Las cifras
oficiales de crecimiento para el trimestre que va de julio a septiembre se
esperan pronto y, si la segunda mayor economía del mundo se contrae, aumentarán
las posibilidades de una recesión mundial.
El objetivo de
Pekín, una tasa de crecimiento anual del 5,5%, ahora está fuera de su alcance,
aunque las autoridades han minimizado la necesidad de cumplir el objetivo.
China evitó por
poco la contracción económica en el trimestre de abril a junio. Este año, algunos
economistas no esperan ningún crecimiento.
Es posible que el país no esté luchando
contra una fuerte inflación como EE.UU. y Reino Unido, pero tiene otros
problemas: la fábrica del mundo de repente ha encontrado menos clientes para
sus productos, tanto a nivel nacional como internacional.