1. May 2022
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¡Proletarios de todos los países, uníos!
¡EL MUNDO VIEJO ESTÁ EN DESCOMPOSICIÓN, TENSAR LAS FUERZAS PARA LOGRAR EL
NUEVO!
“Vivimos momentos históricos, cada uno sabe que es así,
no nos engañemos. Debemos en estos momentos poner en tensión todas las fuerzas
para enfrentar las dificultades y seguir cumpliendo con nuestras tareas. Y
¡conquistar las metas!; ¡los éxitos! ¡la victoria!. Eso hay que hacer”.
Presidente
Gonzalo, Discurso 1992
En los “momentos históricos” que estamos viviendo, la
crisis del sistema imperialista mundial se profundiza cada día más. Más allá de
las crisis de los últimos años, hoy es una crisis que demuestra con mayor
claridad y contundencia que los proletarios del mundo, y con ellos todas las
fuerzas comunistas y revolucionarias, se encuentran en una nueva situación,
frente a nuevos tiempos. La descomposición y decadencia del imperialismo son
evidentes. Y así como la descomposición y decadencia del imperialismo es
históricamente necesaria e inevitable, también lo es la resistencia, la lucha y
la revolución realizadas por las masas de los pueblos, bajo la dirección del
proletariado y sus Partidos Comunistas. Es importante tener esto bien en cuenta
lo que el Presidente Mao Tsetung enfatizó: “Todo lo reaccionario es lo mismo; si no le pegas, no
se cae”. Por lejos que llegue el proceso de
descomposición del imperialismo, por profunda que sea su crisis: ¡ solo a través
de la revolución proletaria, solo a través del aplastamiento de los viejos
aparatos estatales, solo a través de las revoluciones de nueva democracia y
socialistas para el establecimiento de la dictadura conjunta bajo la dirección
del proletariado y su partido y la dictadura del proletariado, será barrido de
la faz de la Tierra!
Concretamente, los comunistas en todos los países del
mundo, se enfrentan a diferentes tareas que están determinadas en cada caso por
la situación concreta de la revolución en cada país. Pero, los comunistas para
la realización de la revolución, así como para la constitución o reconstitución
del partido proletario contra el imperialismo y sus ladrones, verdugos e
incendiarios de la guerra de rapiña, de la guerra injusta, tienen tareas
generales comunes que deben asumir en lo sentido y al servicio de la Revolución
Proletaria Mundial, del proletariado internacional y del Movimiento Comunista
Internacional. Afirmamos la necesidad del Partido Comunista para que el
proletariado dirija las revoluciones de nueva democracia, socialistas y
culturales. Esto debe quedar claro para nosotros, ésta es la garantía de la
victoria. En este 1º de mayo de 2022, Día Internacional de Lucha del
Proletariado, que se desarrolla en tiempos tan convulsos, expresamos nuestra
certeza y optimismo de que los comunistas de los diferentes países tengan
claridad sobre estas tareas, no duden en actuar y abordar las respectivas
tareas con determinación. Saludamos a los comunistas y sus luchas, la dirección
que dan y por la que luchan en todo el mundo; asimismo, queremos conmemorar con
motivo del 1º de mayo a los héroes y heroínas de las filas del ejército del
proletariado mundial. Llevaron la vida en la punta de sus dedos y la dieron por
la gran meta bajo la cual nos unimos y luchamos por alcanzar: el por siempre
dorado comunismo.
Incluso el gran Federico Engels no dejó dudas sobre el
carácter que el 1º de mayo, como día internacional de lucha del proletariado,
debe tener para los comunistas, llamándolo explícitamente un “espectáculo militar” del proletariado, en el que “las fuerzas movilizadas se movilizan como un solo
ejército, marchando y luchado bajo una bandera por el próximo objetivo”. Son los comunistas los que pueden dar mayor
perspectiva a las masas, es la dirección de los comunistas la que se necesita
para dirigir de manera organizada y planificada la inagotable y gigantesca
fuerza de las masas contra el imperialismo y toda reacción. Son las masas las
que hacen la historia y los comunistas deben ser siempre “los más avanzados del proletariado”, como afirmó el Presidente Mao Tsetung.
Este 1º de mayo de 2022, es el primer día de lucha del
proletariado internacional desde que la reacción en el Perú, bajo el mando del
imperialismo estadounidense y con la colaboración activa de la LOD, implementó
su siniestro plan de asesinar al Presidente Gonzalo. Este acto vergonzoso
despertó indignación en todo el mundo y los comunistas, con motivo de este
magnicidio, expresaron su indignación, su disgusto y su justificado odio de
clase en mítines, campañas, declaraciones y acciones entre las masas. En esta ocasión,
nos reafirmamos en la todopoderosa verdad del marxismo-leninismo-maoísmo
probada por el Presidente Gonzalo de la invencibilidad de la guerra popular.
Este 1º de mayo de 2022 nos muestra: que las filas del ejército proletario
crecieron en el último año, que siguió organizándose, que los comunistas
pudieron avanzar donde hacen guerra popular o lucha armada para transformarlas
en guerra popular a pesar de las condiciones a menudo complejas y donde luchan
por la reconstitución de sus partidos, que se unieron más a las masas y
llevaron a las masas con fuerza la necesidad de la reconstitución del Partido
Comunista.
La crisis del imperialismo, su descomposición y
declive, se refleja más claramente en los problemas en los que se sumerge cada
vez más el imperialismo de los Estados Unidos. Sin embargo, el imperialismo
yanqui sigue siendo la superpotencia imperialista hegemónica única a nivel
mundial. La soberbia del imperialismo yanqui en busca de imponer su hegemonía
mundial dividiendo el mundo en seis US-Comandos y como mantiene o despliega sus
fuerzas militares y armas de destrucción masiva no solo en los países oprimidos
hasta de la misma Europa, sino también en muchos países imperialistas como
parte de las fuerzas de la OTAN y en el Japón, la soberbia como utiliza su
dominación financiera y monetaria para imponer sanciones económicas que afectan
no solo a quien van dirigidas directamente sino a sus propios “socios” o
“aliados” y como viola sus compromisos muestra que el imperialismo yanqui no
tiene amigos sino solo enemigos. Esta hegemonía está evidentemente en
problemas, perdiendo fuerza y siempre en contradicciones más profundas con las
naciones oprimidas del mundo, con el proletariado y las masas dentro del propio
país, así como con sus competidores imperialistas. El imperialismo de los EE.UU
funge como auto denominado policía contrarrevolucionario mundial y sigue siendo
el enemigo principal de los pueblos del mundo. En el pensamiento y sentir de
las masas, el imperialismo está enormemente desacreditado, por supuesto en
especial el imperialismo estadounidense, pero no solo él, sino también el
imperialismo como sistema mundial. Al mismo tiempo, caen en la confusión
aquellos sectores de masas entre los cuales las ideologías y teorías
pequeñoburguesas tenían gran resonancia. Esta es también una señal de la crisis
del imperialismo, que está desarrollando su crisis ideológica integral, parte
de la cual es la crisis del reformismo y el revisionismo. Los comunistas deben
ver esto muy claramente, porque el oportunismo tratará de darse “nuevas”
máscaras y tratará de congraciarse con las masas de una manera “nueva”. Pero
los comunistas aprovecharán la crisis ideológica del imperialismo y aquí
también sabrán pelear por la dirección, combatiendo su ofensiva contrarrevolucionaria
general enarbolando, defendiendo y aplicando el marxismo-leninismo-maoísmo para
crear un frente amplio de masas bajo la dirección del proletariado a través de
su Partido Comunista, para sustraer a los sectores pequeñoburgueses de las
masas de la influencia de los reaccionarios y convertirlos en una fuerza aliada
del proletariado. El revisionismo se alinea tras bastón de mando del
imperialismo, pues son quienes levantan campañas a favor del imperialismo ruso
y el socialimperialismo chino pretendiendo confundir al proletariado, sin
embargo, su discurso es débil, como su ideología burguesa, que se desvanece
cuando el proletariado aplica el marxismo-leninismo-maoísmo.
Ante las recurrentes crisis de sobre-producción, la
creciente pauperización de las masas y la siempre creciente acumulación del
capital, éste busca febrilmente nuevas oportunidades de inversión para
continuar con su explotación productiva, que incluye las supuestas energías
“verdes” y “renovables”, descargando sus mayores costos sobre las espaldas de
las masas y al mismo tiempo intensifica la explotación de la fuerza de trabajo
asalariado incrementando la plusvalía relativa y absoluta y el saqueo del
pueblo a través de la exportación de capitales, la deuda, la inflación y la
reducción de servicios para las amplias masas, mientras se incrementan todo
tipo de subvenciones e infraestructuras para las empresas de los grandes
monopolios del capital financiero. Pero vimos las rebeliones en Chile
encendidas por los aumentos de precios en el transporte público, en Colombia
revueltas masivas contra la “reforma tributaria”, como se vio las protestas de
los chalecos amarillos en Francia que encontraron en el aumento de los
combustibles una causa importante y también en el momento actual los
imperialistas se enfrentan a la respuesta justificada de las masas contra el
peso de la crisis. Al mismo tiempo, el mundo está siendo barrido por oleadas de
luchas de masas por el tema de la alza general de los precios y de la salud,
por la salud integral de las masas y contra las medidas anti-democráticas que
los imperialistas y sus lacayos intentan imponer bajo el pretexto de “combatir
la pandemia”. En relación con esta ola internacional de luchas populares, la
resistencia se levanta cada vez más contra las tendencias de la
reaccionarización que, según las condiciones concretas, puede ser de
centralización absoluta en el Ejecutivo o de absolutismo presidencialista o el
fascismo, y la militarización.
Es incuestionable: ¡la burguesía ya no puede
simplemente continuar como antes, las masas populares se enfrentan a todas las
preocupaciones importantes y muchas veces logran la victoria sobre los
reaccionarios! Ejemplos destacados de la lucha de las masas, y al mismo tiempo
señales de fuego del nuevo período de revoluciones dentro de la nueva era, son
las luchas de las masas campesinas. Así en la India y el Brasil vemos sus
tremendos movimientos y poderosas manifestaciones. En India, más de 250
millones participaron en la gran huelga general y el movimiento fue el
movimiento campesino más duradero en la historia del país. Las naciones
oprimidas están luchando con ellos, por lo que las masas en Malí infligieron
fuertes derrotas a los imperialistas de la llamada Union Europea (UE). El
Presidente Mao declaró: “Sean cuales fueren las clases, partidos o individuos de una nación
oprimida que se incorporen a la revolución, tengan o no conciencia de este
punto, lo entiendan o no en el plano subjetivo, basta con que luchen contra el
imperialismo para que su revolución sea parte de la revolución mundial
socialista proletaria, y ellos mismos, aliados de éste” (Sobre la Nueva Democracia). Incluso en los
países imperialistas, las nacionalidades oprimidas se rebelan y luchan. Así
Irlanda sigue clamando por la unidad nacional y el fin de la ocupación, en
Corcega miles volvieron a salir a las calles para rebelarse contra las
decisiones de la justicia de clase francesa. Así vemos que las principales
fuerzas de la Revolución Proletaria Mundial lanzan sus filas a la lucha cada
vez más resueltamente, y también su fuerza dirigente, el proletariado,
obviamente está entrando en un nuevo gran ciclo de lucha de clases. Las luchas
por sus intereses cotidianos están ganando en alcance y agudeza, muchas de
estas disputas están dando saltos a las luchas políticas, como las huelgas de
los trabajadores portuarios italianos para impedir los envíos de material de
guerra imperialista a Ucrania. Cada vez con más frecuencia, sectores enteros de
las masas proletarias actúan de forma independiente y son capaces de liberarse
de las viejas garras del reformismo, signo claro del avance de las condiciones
subjetivas de la revolución.
En esta nueva situación, las luchas del proletariado
serán presa de una nueva conciencia de sus grandes tareas políticas,
principalmente la tarea pendiente y atrasada de la constitución o
reconstitución de los Partidos Comunistas. Vemos que los comunistas están
aumentando sus esfuerzos para arraigarse profundamente en el proletariado y
también darán todo para dar este salto con la clase obrera. En todas estas
luchas y movimientos, entre las masas de las naciones oprimidas, entre los
campesinos y las masas del proletariado y los pueblos, las guerras populares en
la India, en Filipinas, en Turquía y en el Perú son las que abren brecha al
camino que tiene que transitar la Revolución Proletaria Mundial. Dan confianza
a los comunistas, elevan el optimismo y dan importantes lecciones e inspiración
al Movimiento Comunista Internacional. Los comunistas hacen todo lo posible
para propagar su ejemplo a seguir por las luchas armadas y otras formas de
lucha que hay en el mundo, apoyarlos y difundir el Internacionalismo Proletario
con su ejemplo.
En un vano intento por superar la crisis a más largo
plazo, la burguesía está recurriendo a un fin parcial de la política económica
que denominó “neoliberalismo” y está promoviendo una política económica de
mayor intervención del Estado en la economía como expresión clara del
capitalismo monopolista de Estado. Esta es una ley de preparación para la
guerra, y los imperialistas están preparando la nueva guerra imperialista
mundial por nuevo reparto. Porque la vieja y única superpotencia hegemónica,
los EE.UU., debe afirmar su supremacía, mientras el social-imperialismo chino
se prepara cada vez más para su sueño de llegar a ser superpotencia y disputar
la hegemonía mundial. Rusia, la superpotencia atómica imperialista, está
tratando de romper el cerco de sus rivales encabezados por los Estados Unidos.
La Rusia imperialista busca desesperadamente defender o, en su caso, restablecer
el dominio semicolonial y la zona de influencia del socialimperialismo,
agitando la bandera de los viejos zares de la “Gran Rusia”. Esta contienda por
nuevo reparto encontró sus expresiones sangrientas en el pasado reciente en
Yugoslavia, Afganistán, Irak, Libia y Siria. Ahora se manifiesta con una nueva
fase de guerra en Ucrania. La historia reciente de opresión y explotación
semicolonial y colonial de Ucrania se remonta al revisionismo que restauró el
capitalismo en la Unión Soviética y debe entenderse como parte del proceso de
descomposición y bancarrota del social-imperialismo soviético de los años 60 a
los 80.
Luego, en los 1990 pasa a ser semicolonia del
imperialismo ruso principalmente y a partir de los 2000 la disputa imperialista
por sustraerla de este dominio con los imperialistas yanquis y alemanes, etc.
se hace más aguda hasta los sucesos del “Maidam” y el cambio de régimen en
Ucrania por uno a favor del imperialismo yanqui a partir del 2014. Con lo cual,
Ucrania deja de ser una semicolonia dependiente principalmente del imperialismo
ruso en lo político, económico, militar, etc. a ser una semicolonia dependiente
principalmente del imperialismo yanqui y la a contienda imperialista por
Ucrania entró a una situación de guerra.
Con la guerra de agresión imperialista de Rusia, esa
guerra entra en una nueva fase, en la situación en Ucrania se expresan
fundamentalmente dos contradicciones: nación-imperialismo (contradicción
principal) y contradicción interimperialista (contradicción secundaria), y tres
fuerzas: las invasoras del imperialismo ruso y sus aliados dentro y fuera de
Ucrania, los imperialistas yanquis y alemanes (OTAN) con sus lacayos ucranianos
entre los cuales están fuerzas neonazistas, y la nación oprimida Ucrania. Los
ladrones y sabuesos imperialistas tienen en común que quieren llevar a cabo sus
intereses sobre las espaldas del pueblo ucraniano, impedir el desarrollo de
Ucrania como una nación y tratar de subordinar completamente el país a sus
intereses en pugna. Las masas están resistiendo heroicamente contra la
dominación extranjera imperialista, ahora enfrentando la guerra contra la
invasión del imperialismo ruso, están luchando por una Ucrania libre y
autodeterminada, contra la injerencia y la servidumbre imperialistas, contra
los golpistas apoyados por Estados Unidos en Kiev, pero principalmente contra
la invasión imperialista rusa.
Las justas y grandes metas de esta lucha del
proletariado y pueblo ucraniano se lograrán ciertamente si se logra forjar un
frente democrático y patriótico que pueda expulsar del país a los imperialistas
rusos y sus lacayos, conjurando la intervención de los otros imperialistas que
bajo el pretexto de la ayuda a Ucrania quiere sustituir al invasor imperialista
ruso por su propia dominación imperialista del país. Los imperialistas están
tratando de crear confusión entre las masas por medio de la histeria, en nombre
de una guerra nuclear inminente, ademas de maquinaciones y patrañas de parte a
parte. Intentan paralizar a las masas para atraerlas a sus siniestros planes de
guerra. Sin embargo, como enseña el Presidente Mao, incluso “la bomba atómica es un tigre de papel” y los comunistas, especialmente en la
actualidad, deben basarse firmemente en el principio de que o la revolución
conjura la guerra imperialista o la guerra imperialista atiza la revolución. Y
es deber de los comunistas luchar por impedir la guerra mundial, lo que solo es
posible mediante la lucha revolucionaria por el derrumbe de los gobiernos
imperialistas y sus lacayos, de dar guerra revolucionaria a la guerra
imperialista. El Presidente Mao nos llamó a estar preparado para enfrentar la
guerra de agresión imperialista, las guerras imperialistas, la guerra mundial
imperialista con armas atómicas, llamó a hacer todo los preparativos para
enfrentar todas las dificultades que se nos presente desarrollando la
revolución con hacer la guerra popular, que implica llevar a cabo las
revoluciones de nueva democracia, las socialistas y hasta las culturales. Con
la guerra popular podemos enfrentar todas las dificultades y tener la respuesta
para el momento preciso en que se presenten, sino estaremos a merced de los
acontecimientos. Con guerra popular barreremos al imperialismo y la reacción de
la faz de la Tierra dentro del “período de los 50 a 100 años” contados desde los inicios de la década de los
60 del siglo pasado previsto por el Presidente Mao. Los maoístas sabemos lo que
tenemos que hacer y cual es nuestra tarea en la presente situación del mundo y
en el nuevo período de revoluciones en que se está entrando la historia
mundial.
El año transcurrido desde el pasado 1º de mayo trajo
grandes tareas para los comunistas de todo el mundo y los enfrentó a
importantes desafíos. Las condiciones objetivas continuaron madurando y, en
correspondencia, las condiciones subjetivas para la revolución se desarrollan
favorablemente siguiendo la ley del desarrollo desigual y es necesario que los
comunistas, lo que hoy significa ser marxista-leninista-maoístas, asuman las
tareas que les espera con la nueva situación. Esto incluye, especialmente en
los países imperialistas, la superación del espíritu de círculo como una de las
grandes tareas, forjando el frente acorde con las tareas de reconstitución del
Partido Comunista, que debe dirigir. Resaltamos nuestra comprensión de lo que
enseña el Presidente Mao Tsetung, que los comunistas y revolucionarios buscan
la unidad, mientras que el revisionismo y el oportunismo buscan la división.
Insistimos en el establecimiento de la unidad del proletariado rojo a través de
la discusión y la lucha de dos líneas, y entendemos esta tarea no solo como una
tarea que enfrentan los comunistas a nivel nacional, sino también
internacional. Porque nuestra tarea es poner la bandera roja de la Revolución
Proletaria Mundial y el marxismo-leninismo-maoísmo en la punta de lanza de las
luchas del proletariado y los pueblos del mundo. Esto es lo que las masas
exigen de nosotros. Pero para eso, nuestras filas deben estar unidas, para eso
necesitamos una unidad que nos permita dar nuevos pasos, más firmes y más
altos. La unidad de los comunistas es muy importante por eso tenemos que
realizar la Conferencia Internacional Maoísta Unificada, para dar nacimiento a
una Nueva Organización Internacional del Proletariado. Esto es lo que se
requiere de nosotros. Podemos emprender esta tarea con certeza y confianza,
porque su necesidad es obvia, las circunstancias claman por ello. El
proletariado y los pueblos lo demandan con firme voluntad. Para este propósito,
mostremos el “espectáculo del ejército” del 1º de mayo, con “las fuerzas
movilizadas” del proletariado y uniéndonos bajo este objetivo – ¡Unirse bajo el
maoísmo!
¡VIVA EL 1º DE
MAYO, LEVANTAR EN ALTO LA BANDERA ROJA INVENCIBLE!
¡ABAJO CON LA
GUERRA IMPERIALISTA! ¡VIVA LA GUERRA POPULAR!
¡UNIRSE BAJO EL
MAOÍSMO!
¡ADELANTE A LA
CONFERENCIA INTERNACIONAL MAOÍSTA UNIFICADA!
Firmantes:
Partido Comunista del Perú
Partido Comunista de Brasil (Facción Roja)
Partido Comunista del Ecuador – Sol Rojo
Partido Comunista de Colombia (Facción Roja)
Comité Bandera Roja – RFA
Comités para la fundación del Partido Comunista
(Maoísta) de Austria
Partido Comunista Maoísta – Estado Francés
Partido Comunista Maoísta – Estado Español
Comité Maoísta Finlandia
Servir al Pueblo – Liga Comunista de Noruega
Fracción Roja del Partido Comunista de Chile
Onda Roja (Dinamarca)
Núcleo Revolucionario para la Reconstitución del
Partido Comunista de México (NR-PCM)
[Observación: Los comunistas austriacos tienen algunas
diferencias en el análisis de la situación política en Ucrania].